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Sector palmero espera una baja de 20% en su producción por impacto climático
Las exportaciones de grasas y aceites comestibles, que en su mayoría proviene del aceite de palma, superaron los US$1 mil millones en 2023, sin embargo, este año se proyecta una reducción de al menos el 20% a consecuencia de la variabilidad climática.
Directivos de Grepalma durante el IV Congreso Palmero CPAL en Antigua Guatemala en donde dieron a conocer las proyecciones de producción 2024. (Foto Prensa Libre: Juan Diego González)
Varios factores han incidido en la mejoría de los precios y el volumen de producción de aceite de palma, que en 2023 superó los US$1 mil 60 millones, convirtiéndose en el segundo producto generador de divisas de los 25 bienes principales de exportación, según los registros oficiales del cierre de comercio exterior.
Las cifras indican que la producción de aceite crudo de palma fue de un millón 100 mil toneladas métricas el año pasado, posicionando a Guatemala como uno de los actores claves en la industria, pero para esta cosecha se advierte una severa reducción.
Los productores ya prevén una posible contracción del 20% de la producción anual, asociada al efecto del fenómeno El Niño, que impactará en la producción de la fruta para extraer el aceite, y la cadena es realista ante esta situación.
Durante esta semana, la Antigua Guatemala es la sede del IV Congreso Palmero CPAL,que reunió a más de 640 participantes de 16 países, y se dieron a conocer las tendencias del sector, los avances y desafíos, así como la sostenibilidad y el intercambio de información; la actividad que concluye hoy.
Expectativas
José Santiago Molina, presidente de la Gremial de Palmicultores de Guatemala (Grepalma), indicó que hay varios factores que explican el crecimiento registrado en 2023 en cuanto al volumen y monto generador de divisas de las exportaciones de aceite de palma, algo que no se repetirá en 2024.
Molina comentó que la pandemia y, más reciente aún, el conflicto entre Rusia y Ucrania, han incidido en los precios internacionales de los commodities, que en general varían en función del precio del petróleo, pero el aceite de palma, que tiene varios usos, no ha sido tan afectado, y “afortunadamente para los mercados de aceite, ese conflicto entre Rusia y Ucrania golpeó la producción de girasol en el mundo, que generó una escasez, y empezó a generar demanda de palma en los países que lo producen”.
“Lo que estamos viendo es que las demandas por los múltiples usos del aceite de palma han logrado que el precio se mantenga en una media que permite ir hacia adelante, crecer y que permite a nuevos -productores- pasarse a este cultivo permanente, que bien manejado es rentable”, precisó el directivo.
"Hemos visto que en enero y febrero ha sido más drástica la caída de la producción"
José Santiago Molina, presidente Grepalma
Entre los usos, además de la industria de alimentos en que se utiliza esta materia prima, está la fabricación de cosméticos, jabones, biodiesel, agroquímica, entre otros. En 2023 el promedio de una tonelada métrica de aceite de palma fue de US$953 y en lo que va del 2024 es de US$985 en el mercado spot.
En la actualidad, la producción de palma es de 180 mil hectáreas, pero hay oportunidad para 800 mil hectáreas, según el Ministerio de Agricultura, Ganadería y Alimentación (Maga).
Molina aseveró que con solo 180 mil hectáreas Guatemala es el sexto productor a escala mundial, y el segundo productor en América Latina, y si se logran las 800 mil hectáreas, la contribución al Producto Interno Bruto (PIB) sería mucho mayor, y sobre todo las tareas que se hace en las comunidades que se ven beneficiadas con la inversión de esta industria.
El presidente de Grepalma recordó que el producto es el producto número uno de exportación hacia mercados de Europa y México.
Baja producción
Sobre las proyecciones de producción de aceite de palma, el directivo, aseguró que las estimaciones no son favorables, y esto se debe a la presencia del fenómeno El Niño que empezó afectar desde junio 2023 a la fecha, y se calcula una disminución del 20 por ciento de fruta.
“Hemos visto que en enero y febrero ha sido más drástica la caída de la producción. No creo que se vaya a llegar a una producción un millón 100 mil toneladas; dudó que lleguemos a 900 mil toneladas en 2024 que es el estimado”, remarcó el presidente de Grepalma.
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Afirmó que para las plantaciones en donde hay riego no habrá problema, porque el agua se reemplaza, pero los inconvenientes son donde no hay riego, que es en la mayor parte del país, entre ellos la Franja Transversal del Norte, el Sur de Petén, el Valle del Polochic y el Valle del Motagua.
Además, este año se espera el fenómeno La Niña, con agua en exceso, por lo que las plantaciones han sido diseñadas con sistemas adecuados de drenajes.
Este fenómeno climático se estaría presentando en julio o agosto de este año, según los análisis del sector.
Desafíos
El sector también enfrenta desafíos sobre todo en la parte de infraestructura, específicamente en el estado de las carreteras, tanto las de terracería como las pavimentadas, ya que los servicios de transporte hacen un cobro más al del promedio mundial para la exportación de la materia prima.
Otro problema es la ineficiencia en la Empresa Portuaria Nacional Santo Tomás de Castilla (Empornac) en Izabal, donde sale el producto de exportacióny donde no son precios competitivos en comparación con otras terminales portuarias para los servicios que se requieren.
Crecimiento anual
En 2023 se creció en cinco mil hectáreas adicionales y para este año se prevé la misma cantidad.
Al hablar sobre un crecimiento para el siguiente quinquenio, el directivo de Grepalma enfatizó que depende de los precios internacionales, de las tasas de interés del sistema financiero, y otros indicadores que tienen que ver para la toma de decisiones de los productores.
Área de crecimiento
En la actualidad las áreas de crecimiento en el cultivo de palma están en el norte del país, sobre todo en el suelo de uso ganadero de Petén, la Franja Transversal del Norte que va desde Izabal a Quiché, son sectores en donde hay mucha oportunidad.
En Izabal, el cultivo está muy avanzado, pero también es un sector de oportunidad, y en la Costa Sur, hay una competencia con otros cultivos como la caña de azúcar y banano, por la calidad de los suelos, y en donde los valores de la tierra son mucho mayores.
Alcanzar a Colombia
El sector agroindustrial también tiene un programa en el corto y mediano plazo, y uno de los objetivos es lograr incrementar el área de cultivo.
El primer productor de aceite de palma en América Latina es Colombia, con 500 mil hectáreas, pero los principales a escala mundial están en Asia, entre ellos Indonesia, con 11 millones de hectáreas; Malasia, con seis millones de hectáreas y Tailandia, con dos millones de hectáreas.
En productividad, el aceite de palma tiene un promedio de 26.7 toneladas de racimo de fruta fresca por hectárea al año, y 5.9 toneladas métricas de aceite crudo de palma por hectárea cada año.
Molina concluyó que en Guatemala hay buenos suelos, buenos agricultores, mejores prácticas y bien nutridas, lo que genera un buen clima para continuar con la inversión.
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