La misma incluye aspectos como eliminar recursos que entorpecen procesos y limitar la acción de amparo en el ámbito civil. Además, rectificar el sistema de comisiones de postulación para la elección de cortes sin incluir al Colegio de Abogados como participante en las comisiones, y formular un nuevo modelo para designación, plazos y funciones de los magistrados de la Corte Suprema de Justicia (CSJ).
El abogado Eduardo Mayora comentó que la propuesta incluye una reforma, pero que también se requiere otra, constitucional, para el sector justicia.
Por su parte, Hermann Girón, presidente del Cacif, informó que el planteamiento corresponde al tercer eje que presenta la entidad como parte de la iniciativa “Un Nuevo Rumbo de Nación”.
También refirió que la discusión debe ser sistémica e integral, y no solo abordar el tema de abogados sino de todos los actores clave que participan en la justicia, como los propios usuarios y académicos, entre otros.
Reforma empieza por sector justicia
La propuesta se hace luego de recabar ideas y análisis de personas de diferentes sectores, quienes coincidieron en varios hallazgos, aunque difieren en su visión para una posible reforma constitucional.
Mayora dijo que en general está de acuerdo con las propuestas, ya que se necesita revalorar la gestión del juez y dotarlo de herramientas, así como efectuar reformas en el aspecto procesal. A ello se suma revisar el proceso de selección de funcionarios judiciales.
Consultado respecto de si existen condiciones para una reforma constitucional, Girón expuso que la polarización en el país, las diferencias ideológicas y otras dificultades que venían desde el 2015 se profundizaron, por lo que considera que es muy difícil generar acuerdos sobre una reforma a la Carta Magna que genere confianza en los diferentes sectores. Por lo tanto, el Cacif propone una reforma profunda que tiene su punto de partida en el sector justicia.
A criterio de Mayora el momento perfecto para una reforma constitucional no existe, pero que las grandes reformas son consecuencia de grandes crisis. Agrego que algunos países se decantan por las reformas y evitan la revolución, pero que otros caen en esta última, como sucedió en Venezuela.
Todos los aspectos de la Carta Magna son perfectibles, pero Mayora estima que si se proponen temas que no se relacionen con la administración del sistema de justicia, no va a haber una reforma constitucional en el país. “Si queremos una mejor justicia tenemos que llegar a ese acuerdo mínimo. Si no, en mi opinión no va a haber reforma constitucional, de la justicia ni de nada”, enfatizó.
Otros de los hallazgos y conclusiones en las que coincidieron especialistas en el tema son la falta de acceso a justicia y la incertidumbre legal que continúa en aumento. Los procesos institucionales y la eficiencia del sector se encuentran cada vez más erosionados, concluyó.
Reformas profundas
- El tercer eje plantea la necesidad de reformar el Código Procesal Civil para eliminar recursos, tecnicismos y formalismos que no hacen más que entorpecer y desgastar los procesos. Además, se contempla incluir una limitación de la acción de amparo en los procesos civiles, dijo Diego Marroquín, director de Gestión Pública del Cacif.
- Considerar la oralidad es otro de los puntos propuestos para promover cambios normativos que permitan celebrar procesos civiles haciendo uso de esta.
- Asimismo, para evitar la politización la propuesta va dirigida a rectificar el sistema de Comisiones de Postulación para la elección de Cortes.
- Otro planteamiento es que se establezca un diálogo de especialistas que analicen temas como la ampliación de plazos para los cargos de magistrados de la Corte Suprema de Justicia, aunque no detallaron un plazo específico.
Con la iniciativa “Un Nuevo Rumbo de Nación” con motivo del bicentenario el Cacif lanzó en abril del 2021 un llamado al diálogo nacional para lo cual preparó 6 ejes.
Está presentando un eje mensual, el primero fue Corrupción y lucha contra el narcotráfico.
El segundo es acerca de la seguridad social en Guatemala.