La segunda recomendación que les hago consiste en tomar en cuenta el costo de funcionamiento de su casa al establecer el costo operativo de su empresa. Este costo de funcionamiento de la casa vendría a ser como el salario mínimo que el dueño o dueña debiese recibir de su empresa para poder cubrir su Gasto Completo Mensual Familiar, en el cual se toman en cuenta sus Gastos Fijos, más una provisión mensual prorrateada para cubrir sus Gastos Eventuales del año.
Para estos emprendedores y emprendedoras hemos creado una fórmula sencilla que permite conocer su punto de equilibrio mensual y ha dado estupendos resultados. Dicha fórmula es esta: el gasto completo mensual de la casa, más el gasto completo de la empresa multiplicado por 100, dividido el porcentaje de utilidad que me deja lo que vendo, es igual a ventas por realizar al mes.
Como preparar fácilmente su presupuesto
Para que podamos tener un presupuesto de gastos fijos mensuales, lo más realista posible para nuestro medio e idiosincrasia, habrá que considerar al menos diez áreas de gasto. A su vez, cada una de esas diez áreas podrá tener varios renglones a tomar en cuenta.
Por ejemplo, en la primera área, que sería educación, habría que incluir el costo de la colegiatura, transporte escolar, refuerzos o tutorías y clases extras como ballet, karate, música, natación, etc. La segunda sería seguros de pago mensual y ahorro, como los de vida, gastos médicos, vehículos, propiedades, servicios funerarios, camposanto, ahorro, cuchubal y fondo de retiro.
La tercera que tendríamos que considerar es esparcimiento, gustos y diversión, y aquí estaríamos hablando de entretenimiento, paseos, salidas a comer afuera, membresías de club y de gimnasio. La cuarta área de gasto es transporte, y ahí estaríamos considerando pasajes de trasporte colectivo o bien, gasolina y lavado de vehículos.
La quinta sería gastos personales, en donde consideraríamos lo que le asignamos a gastos personales a mamá y papá para cubrir, entre otros gastos, el corte de cabello, salón de belleza, lustre de calzado, parqueos, periódicos, almuerzo en el trabajo, así como lo que le damos a los hijos de mesada para su gasto personal en el colegio, la universidad y salidas a divertirse.
La sexta sería las ofrendas a tu iglesia, beneficencias y Aayuda a familiares. La séptima área es gastos de la casa, la cual involucra varios renglones, como mercado, tienda del barrio, tortillería, panadería, carnicería, agua pura, lavandería, teléfono fijo, celulares, internet, cable, basura, luz, agua, gas, seguridad y mantenimiento, alquiler, servicio doméstico, jardinero y gastos varios. Es aconsejable para estos últimos disponer de una cantidad que funcione como caja chica que cada mes sea renovada.
La octava área a tomar en cuenta, es la de supermercado. La novena es la de farmacia. Y, por último, la décima es abonos o pagos a acreedores a quienes les debemos, tales como familiares, inmobiliarias, agencias o ventas de vehículos, amistades, bancos, tarjetas de crédito, vendedores al crédito, cooperativas y prestamistas, entre otros.
Sumadas todas las cantidades a gastar en cada renglón no deberá ser mayor a tus ingresos, sino menor a estos, para que siempre te quede una ganancia. Esa ganancia mensual será tu ahorro, y este, tu capital.
Planificar el gasto y ajustarnos o ceñirnos a lo planeado nos ayuda a vivir dentro del límite determinado por uno mismo sin dejar de darse gustos y disfrutar de comodidades. El presupuesto es un plan de gastos hecho a la medida de las posibilidades o ingresos de cada uno. Si uno lo observa apropiadamente, logrará ahorrar plata en lugar de extralimitarse en los gastos. Queda en uno desarrollar una actitud de control de gastos que garantice el logro de esas metas.
Visita nuestra página www.EduardoPalacios.com para descargar materiales gratuitos. Ya en librerías la séptima edición de mi libro “Como Hacerla en la Vida”.