Presupuesto 2025: Centros de investigación coinciden en preocupación por el aumento del déficit fiscal a 3.1%

Representantes de los tanques de pensamiento económico, realizaron observaciones al proyecto del presupuesto de ingresos y egresos 2025 por Q148 mil 526 millones, a los diputados que integran la Comisión de Finanzas del Congreso, que lleva a cabo las audiencias públicas, previo a emitir un dictamen.

El aumento del déficit fiscal a 3.1% por Q29 mil 412 millones, de los cuales Q25 mil 104 millones corresponden a la contratación de deuda interna neta, fue la principal preocupación que expusieron a los legisladores, representantes de la Fundación 2020, Centro de Investigaciones Económicas Nacionales (Cien), Asociación de Investigación de Estudios Sociales (Asíes), y el Instituto Centroamericano de Estudios Fiscales (Icefi).

Los investigadores instaron a la revisión y ajuste de estos parámetros ya que a su juicio consideran que “se sale de lo observado” en otros ejercicios fiscales, así como la actualización de las cifras por parte del Banco de Guatemala (Banguat) y de la Superintendencia de Administración Tributaria (SAT) sobre las perspectivas de cierre 2024 y 2025, “para contar con un presupuesto más ajustado a la realidad”. expusieron los especialistas.

Ajuste del techo  

Mario Alberto García Lara, director ejecutivo y Edwin Matul, investigador de la Fundación 2020, hicieron ver en la reunión que la iniciativa de presupuesto 2025, continúa alejándose de la disciplina fiscal y de sostenibilidad a mediano plazo.

“El enfoque que se tiene sobre la sostenibilidad de la deuda, cuando se tiene déficit por encima del 2%, se considera que, en el mediano plazo, será insostenible; una de las preocupaciones es el salto que tendrá el déficit fiscal, ya que este año se espera que cierre en 2.5% a un 3.1%”, apuntó Matul.

La idea fundamental es que se vaya en la línea de garantizar la sostenibilidad fiscal.

La Fundación 2020, planteó a los integrantes de la referida sala de trabajo una reducción del déficit fiscal entre 2% a 2.5%, con un techo presupuestario prudente que puede ir entre los Q137 mil millones hasta Q142 mil millones como gasto aceptable.

Asíes: Deuda para funcionamiento

Pedro Prado, investigador de Asíes, remarcó que la variable que llama la atención en la iniciativa de presupuesto es el incremento del déficit fiscal con respecto al producto interno bruto (PIB) por los Q29 mil 412 millones, ya que para este año se proyecta en 2.4% del presupuesto vigente.

Reiteró que, en el financiamiento del déficit fiscal en 2025, el aumento de la deuda bonificada se estaría duplicando al del 2024, para alcanzar los Q25 mil 104 millones, y “de ese endeudamiento, se contempla un aproximado de 48% para gastos de funcionamiento, y lo que contraviene al artículo 61 de la Ley Orgánica del Presupuesto, y que solo el 24.5% se estaría destinando para inversión física, que es lo ideal”.

Prado, resaltó que la carga tributaria con respecto al PIB estaría ubicándose en 11.7% similar al 2024 y que a su juicio “los ingresos tributarios constituyen la fuente más sana de financiamiento presupuestario, por lo cual debe reforzarse las medidas para aumentar la cobranza, y estudiar a fondo las que pretendan reducirla”.

Cien: obras sin requisitos

Jorge Lavarreda, analista del Cien, comentó que, en la propuesta del presupuesto para el siguiente año, implicaría el inicio del cambio de la tendencia a la baja en la participación del gasto de inversión.

Declaró que en el análisis que han realizado en la propuesta 2025 se propone Q5 mil 280 millones para 222 obras en los ministerios de Estado y otros Q4 mil 299 millones para dos mil 659 obras que estarán cargados en los Consejos Departamentales de Desarrollo Urbano y Rural.

Aclaró que, en una revisión realizada, pudieron encontrar obras propuestas en el proyecto del presupuesto, que no han cumplido con todos los requisitos técnicos en el Sistema Nacional de Inversión Pública (Snip).

Lavarreda, declaró que hay por lo menos unos Q600 millones en obras que no cuenta con los requisitos que establece la normativa.

El Cien al igual que el Icefi proponen estimar los ingresos tributarios para el siguiente año con escenarios macroeconómicos más actualizados, tanto del desempeño económico como de la recaudación tributaria.  

Icefi: incremento voluminoso de la deuda

Ricardo Barrientos, director ejecutivo del Icefi, detalló que les llama la atención el incremento voluminoso de la deuda pública bonificada.

En la presentación, mencionó que habrá deuda para pagar deuda, ya que se destinaran unos Q5 mil 754 millones que equivale a 22.9% para el servicio de la deuda, unos Q5 mil 585 millones para el Ministerio de Comunicaciones, Infraestructura y Vivienda (Micivi) y unos Q5 mil 585 millones para el Ministerio de Salud que representa 22.2%, que son los rubros más significativos.

Al igual que la Fundación 2020, Barrientos destacó el incremento del déficit fiscal, ya que en 2021 fue -1.2%; 2022, -1.7%; 2023, 1.3%; 2024, 2.6% y para 2025 en situarse 3.1%.

Una de las recomendaciones del Icefi es que el Ejecutivo explique la justificación del aumento de la deuda, y que se avance en corregir en la proyección de ingresos tributarios, ya que persiste cierto error de subestimación.

Análisis de asignaciones

El diputado Julio Héctor Estrada, presidente de la Comisión de Finanzas, indicó que el déficit pareciera que se va a ir a una estructura de gasto que ya se tiene.

Se estudiarán las asignaciones, sobre todo las de funcionamiento, la compra de maquinaria en el Micivi ya que “hay muchas cosas que aclarar para justificar el uso de bonos para financiar esos programas”.   

“Son insumos que vamos tomando, no podemos hablar de un monto específico y todo depende del consenso de la comisión, ya sea que se pueda reducir algunos rubros y la identificación de prioridades”, concluyó.