De las 11 actividades productivas, tres reportaron desempeño negativo en el segundo trimestre del 2017. Estas son minas y canteras, con 0.2%; industria manufacturera, 0.7%; y administración pública y defensa, con 0.1%.
La actividad que más crecimiento mostró fue intermediación financiera, con 3.9%, seguida de servicios privados, 3.8%; y comercio, 3.7%.
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Las exportaciones de Guatemala subieron 6.5% a agosto último y sumaron US$7 mil 534 millones —Q55 mil 299 millones—, cifra mayor en US$457.9 millones respecto del mismo período del año pasado. Las ventas al exterior siguen encabezadas por vestuario. Las importaciones crecieron 7.3%, para situarse en US$11 mil 913.9 millones.
En conjunto, la economía en el segundo trimestre generó Q62 mil 423 millones.
Juan Carlos Tefel, presidente de la Cámara de Industria, explicó que el resultado en minas y canteras era de esperarse, por el cierre de la mina Marlin, y en cuanto a la industria, el impacto se debe a la revaluación de la moneda y el contrabando, sobre todo desde México, de productos alimenticios y manufacturados.
Añadió que en la administración pública la caída se debe a un menor gasto de parte del Gobierno, el cual se ha reflejado en una menor ejecución, a pesar de que cuentan con disponibilidad de recursos.
Luis Fernando Samayoa, presidente de la Asociación Bancaria de Guatemala, afirmó: “El indicador está mostrando señas de que habrá una caída; sin embargo, habría que esperar el cierre del ejercicio”.
“Nos preocupa todo el clima de incertidumbre que se ha generado, desde los fallos judiciales que han impactado en las hidroeléctricas, minas, intervenciones y, recientemente, el clima político”, afirmó el ejecutivo.
Samayoa subrayó que se debe trabajar en un clima que genere confianza en la economía.
Su visión es que dicho clima se logrará con el cumplimiento de reglas claras y disciplina en el actuar económico.