programa de gastos

Mario Alberto García Lara: “El presupuesto 2025 no tiene ninguna meta de política pública, es más un reparto parecido a otros ejercicios recientes”

Las asignaciones presupuestarias que aprobó el Congreso dirigidas para codedes y municipalidades, así como el endeudamiento, siguen generando preocupación, pero se celebra tener un gasto público 2025, indica analista.

Los Codedes, municipalidades y Ministerio de Comunicaciones tendrán asignaciones presupuestarias altas en 2025. (Foto Prensa Libre: Hemeroteca PL)

Mario Alberto García Lara, director ejecutivo de la Fundación 2020 y de la Alianza Técnica de Apoyo al Legislativo (Atal), brindó una perspectiva sobre la aprobación del presupuesto de ingresos y egresos del 2025 por Q148 mil 526 millones, que aprobó esta semana el Congreso de la República y que brinda una asignación extra Q3 mil 500 millones para el Ministerio de Comunicaciones, Infraestructura y Vivienda (Micivi).

El monto del gasto aprobado elevaría para 2025 el déficit fiscal hasta 3.4%, por lo que se sale de la disciplina fiscal que se venía manejando en los últimos años a excepción del año de la pandemia.

También le llama la atención las asignaciones realizadas a los Consejos Departamentales de Desarrollo (Codedes) que junto al presupuesto a las municipalidades comprometen cerca del 20 por ciento del total del gasto. 

¿Cuáles son los principales hallazgos al presupuesto 2025?

El destino del techo presupuestario del gasto no señala ninguna novedad importante; ninguna meta de política pública, que uno pueda decir que este será el legado de la actual administración de gobierno. Más bien es un reparto muy parecido a lo que se ha visto en otros presupuestos en ejercicios recientes.

Es decir, que en general el presupuesto que envío el Ejecutivo, y que lo empeoró en la Comisión de Finanzas (que dirige el diputado Julio Héctor Estrada Domínguez), no es muy diferente a los programas que solían enviarse durante las administraciones de Alejandro Giammattei y Jimmy Morales; no difiere mucho en cuanto a la calidad del gasto, sino que básicamente es más de lo mismo, pero que solo más grande en su monto.

Lo otro que nos sorprendió mucho en la misma línea es que en las normas presupuestarias, que orientan en la forma en qué se debe gastar los recursos, es un poco decepcionante.  De nuevo las normas presupuestarias que envió el Ejecutivo al Congreso otra vez no difieren casi en nada a las anteriores normas presupuestarias que se enviaron de los últimos dos gobiernos, y es más de lo mismo.

Entonces, no se aprovechó la oportunidad para mejorar la transparencia y eficiencia en el gasto en incluir más normas que fueran en ese sentido.

Sobre la deuda bonificable de Q25 mil 104 millones y su destino, ¿qué han analizado?

El gran tema es que estos recursos financiaran el déficit fiscal, por lo que ahí no hay por donde mucho perderse: déficit fiscal grande, la deuda es grande.

Lo que preocupa, es que hay una prohibición explicita en la Ley Orgánica del Presupuesto, que expone que no se puede usar los recursos por la vía de la deuda, para financiar gasto corriente, es decir, funcionamiento.

Esta prohibición explicita no se cumple durante muchos años, y es porque en la ley anual del presupuesto se coloca como una excepción. En este presupuesto 2025, se aumentó el porcentaje que se destinaba a gasto corriente total que era del 10% ahora superara 20%, y eso es un atentado a las buenas prácticas fiscales.

¿Qué han encontrado en la parte de política fiscal?

El presupuesto se hizo de manera tan ambigua que se aumentó a 3.1% y se creó un fondo que no existe en el artículo 142, que es un “Plan extraordinario para el mantenimiento y la rehabilitación de puentes y carreteras”, que es un programa que no existe pero que se aprobó Q3 mil 500 millones extras del monto abultado del presupuesto (Q148 mil 526 millones).

Ese plan que no existe, simplemente se ordena a que se conciba en el futuro que posiblemente aumente al 3.4% del déficit: pero además se dejó otra ampliación un poco ambigua de Q2 mil millones, sin necesidad de ir al Congreso, y por eso consideramos que el déficit puede estar entre 3.4 a 3.6%, y “esto es grave”.

Pero en términos de política fiscal, es positivo la aprobación de un presupuesto por lo que hay un mecanismo de rendición. Hay rubros de inversión que valen la pena que estén, asignaciones de atención a salud, y sería peor que no se hubiera aprobado un gasto, por qué no habría certeza. 

Hay que estar muy vigilantes, por que el monto es alto y los destinos no son todos positivos.

En esas ambigüedades, ¿Cómo se deben interpretar?

Hay dos destinos que nos preocupan mucho: los Codedes y las municipalidades. ¿Por qué?, por qué tradicionalmente tienen características que no son buenas en sus recursos y no son transparentes.

La Contraloría General pone mucha atención a lo que hace el Gobierno Central, que lo que hace los Cocodes y las municipalidades, por lo que ahí hay preocupaciones en cuanto a la transparencia y el uso correcto de los recursos; hablamos del 15 al 17% del total del presupuesto que es un monto muy alto.

La segunda preocupación es que esos destinos de gastos no están asociados a políticas públicas de estado, sino más bien sujetos a la arbitrariedad de los gobiernos locales que no se alinean a políticas estatales a largo plazo.

El proyecto que presentó Minfin tenía entre Q7 mil millones para Cocodes pero en la Comisión de Finanzas se aumentó otros Q5 mil millones; pero aparte hay otros Q11 mil para las municipalidades y hay una normativa (que se aprobó este año) de no devolver los fondos que no usen para este ejercicio, por lo que ya será más del 20% del total del presupuesto dirigido para Consejos y municipalidades, que no son transparentes ni alineados a políticas de estado.

Desgloses

En las ampliaciones hay partidas presupuestarias que no cuenta con una fuente de financiamiento, es decir, no se logra identificar qué unidad es la responsable de la administración y su ejecución del gasto:

  • Previsión para el Circuito Metropolitano del Metro: Q1 mil 200 millones, sin unidad ejecutora.       
  • Asignación para Clases Pasivas: no se define el monto y la fuente de financiamiento para cubrir el Régimen de Clases Pasivas por la ampliación de este año.        
  • Desarrollo Integral: se amplía hasta Q300 millones el presupuesto del Ministerio de Desarrollo para el pago de excombatientes del Ejército, pero sin fuente de financiamiento.        
  • Programa al adulto mayor: El Ministerio de Trabajo tiene una reducción de Q500 millones.
  • Tarifa social: El Inde deberá realizar las gestiones por Q900 millones para cubrir la Tarifa Social de Energía.           
  • Defensa Nacional: Tiene una ampliación de Q400 millones para la compra de equipo e insumos para el Colegio de Ingenieros del Ejército.                

ESCRITO POR:

Urias Gamarro

Periodista especializado en macroeconomía, finanzas públicas e infraestructura, con 20 años de experiencia en medios radiales, impresos y digitales.