El monto proyectado por la Dirección de Análisis y Política Fiscal del Ministerio de Finanzas (Minfin) estaría por encima del convenio de metas que se suscribió con la Superintendencia de Administración Tributaria (SAT) por Q85 mil 765 millones.
Aunque las cifras son iniciales y optimistas, la tendencia se estaría confirmando en el primer trimestre del año, cuando se realice la liquidación anual del impuesto sobre la renta (ISR) que concluye el próximo 31 de marzo.
Contar con un excedente fiscal, en este caso de hasta Q7 mil millones, permitiría a las autoridades hacer frente a situaciones de choques externos, como programas de contingencia o la aprobación de apoyos temporales para reducir los precios de productos estratégicos como los combustibles.
Escenario optimista
Jorge López Urizar, director de Análisis y Política Fiscal del Minfin, conversó con Prensa Libre y explicó que la estimación de recaudación se ubica entre las cifras mencionadas y es la información que se le estará presentando a la misión del Fondo Monetario Internacional (FMI) que visitará el país a finales de mes para llevar a cabo la llamada revisión del Capítulo IV, que consiste en un examen anual de los indicadores económicos de Guatemala, por parte de ese organismo financiero.
En reiteradas ocasiones, tanto el FMI como otros organismos internacionales y agencias de calificación de riesgo-país, han señalado que Guatemala es una de las naciones que cuenta con una de las menores cargas tributaria, pues no fue sino hasta el año pasado, que esta llegó a 12.1% del PIB, un nivel propuesto desde 1996.
La SAT y la FEL
Al preguntarle al funcionario qué estaría explicando el comportamiento alcista extraordinario de la recaudación, afirmó que es resultado de todas las mejoras que la SAT está realizando, sobre todo en materia de implementación de la tecnología en procesos masivos, como la Factura Electrónica en Línea (FEL).
Y ejemplificó que, a diciembre del 2022, hubo una variación del 23% en el volumen facturado respecto a lo registrado en 2021, que tiene incidencia en el ISR y en el impuesto al valor agregado (IVA) de todo el año.
En el convenio de metas mencionado, se proyectó que por la recaudación del ISR se calculan Q23 mil 566 millones y por el IVA local, Q17 mil 678 millones, que en su conjunto hacen Q41 mil 244 millones.
Para el caso del IVA importación, la meta es de Q23 mil 28 millones y por derechos arancelarios, Q3 mil 908 millones que supondrían una cobranza de Q26 mil 936 millones.
Ambos tributos sumarian Q68 mil 180 millones, lo que equivale al 79% del recaudo total programado para el administrador tributario y ahí depende el financiamiento del presupuesto.
Mapa de riesgos
El funcionario reiteró que, dadas las condiciones actuales, se prevén estos resultados; pero también es un poco arriesgado asegurar que así será, ya que según los resultados preliminares, se superó la meta de recaudación del año anterior, pero habría que esperar el primer trimestre del año para tener el dato real.
En todo caso, la referida dirección tiene desplegado un mapa de riesgos, que en su mayoría consisten en factores externos que podrían incidir en la economía local. “En este momento no se observan riesgos que sean altamente dañinos para la economía a muy corto plazo”, manifestó.
El año pasado en estas fechas, ya se veía venir un conflicto geopolítico internacional, lo que comenzaba a incidir en las expectativas, pero tampoco se puede asegurar que ese problema persista durante todo el 2023 o que concluya. Ambos escenarios influirán sobre el comportamiento de la economía global.
A nivel local y en referencia a una posible incidencia del evento electoral, López Urizar afirmó que se desconoce aún la expectativa de los agentes económicos, pero los escenarios previstos por la banca central se encuentran en el informe de “Evaluación de la Política Monetaria, Cambiaria y Crediticia, a noviembre de 2022 y Perspectivas Económicas para 2023”.
Y aclaró que sobre el componente político “nadie sabe cómo pueden reaccionar los agentes económicos”.
