El incremento de la recaudación de este tributo, se debe al ajuste al impuesto del producto que de Q1.50 pasó a Q5 y que se aplicó por la venta de saco de cemento en este ejercicio y que aprobó el Congreso en noviembre del año pasado.
En el 2014, la recaudación fue de Q50.9 millones y en el 2013, de Q51.1 millones.
El cobro del impuesto durante el primer semestre está por encima de la programación establecida por Q146.7 millones para ese plazo.
Para este ejercicio la SAT proyectó una meta de recaudo por Q311.4 millones.
Además del impuesto al cemento, el Congreso aprobó la ley de ajuste fiscal al porcentaje de las regalías 10%, y el impuesto a las líneas de telefonía fija y móvil de Q5.
Este tributo está suspendido de manera temporal por una acción de amparo en la Corte de Constitucionalidad.
Causas
Óscar Sequeira, coordinador de la comisión de estadísticas de la Cámara Guatemalteca de la Construcción (CGC), explicó que en términos generales en el primer semestre el sector ha respondido favorablemente en consumo de cemento como materia prima para construir.
“Abril y mayo fueron positivos en la demanda de cemento y a eso responde la mejora en la recaudación”, comentó.
El directivo añadió que otro factor es la disminución del precio de otras materias primas, como el petróleo y el acero.
En el primer caso, responde a que los agentes económicos cuentan con más recursos —efectivo— por la disminución de precios de los derivados de los combustibles en el mercado local, por lo que las empresas y particulares deciden hacer inversiones en la construcción.
El otro factor, subrayó Sequeira, es a la disminución drástica de los precios del hierro que de Q450 que se cotizó el quintal el año pasado, ahora se comercializa en Q250.
El precio promedio del saco de 42 kilogramos es Q76.98, según la CGC.