La agencia oficial china Xinhua señaló que se trata de la cuarta caída mensual consecutiva de las reservas de divisas en manos del Banco Central, que dispone de la tercera parte de las divisas mundiales.
China fortalecía hasta hace un tiempo sus reservas, comprando dólares, para impedir una apreciación del yuan, perjudicial para sus exportaciones.
A partir del 11 de agosto, las autoridades chinas devaluaron el valor del yuan en un 5%, en un intento desesperado, según los analistas, para respaldar las exportaciones. Pero esa decisión agravó el derrumbe de las bolsas tanto de China como en el resto del mundo, preocupadas ya por la desaceleración de la segunda economía mundial.
“Si el banco central sigue interviniendo, las reservas chinas se seguirán derritiendo, y cuanto mayor sea la intervención, mayor será la reducción” de sus reservas, dijo a Bloomberg el analista Li Miaoxian, de Bocom International Holdings en Pekín.
China revisó el lunes a la baja su estimación preliminar de crecimiento del PIB en 2014, que fue de 7,3% (una décima menos de lo anunciado previamente).
El 7,4% de crecimiento en 2014, anunciado en enero pasado, era ya el índice más bajo desde 1990.
Las autoridades comunistas del país se proponen un crecimiento “de alrededor de un 7%” en 2015, aunque numerosos analistas empiezan a dudar de que se logre el objetivo.