El gobierno agregó que los empleadores en octubre y noviembre sumaron 50 mil puestos de trabajo más que lo calculado anteriormente. En el cuarto trimestre la contratación registró un promedio mensual de 284 mil, la mejor tasa trimestral del año.
Las cifras ponen de relieve la solidez de la economía estadounidense en medio del alboroto global provocado por la desaceleración de la economía china y la caída en picada de su mercado accionario. La mayoría de los economistas prevén que el gasto de consumo compensará cualquier lastre del exterior, aunque pronostican un crecimiento general modesto.
Para todo 2015, los empleadores crearon 2.65 millones de puestos de trabajo, un promedio de 221 mil por mes. Fue el segundo mejor año desde 1999, después del 2014, con un aumento de 3.2 millones de empleos.
“2015 salió excelente”, afirmó Patrick O'Keefe, director de investigaciones económicas de la consultoría CohnReznick. “Muestra una fortaleza subyacente de la economía nacional. Estados Unidos está entrelazado con la economía internacional, pero en un grado mucho menor que muchos otros países”, agregó.
O'Keefe subrayó que el comercio mundial apenas representa un 30% de la actividad económica estadounidense, uno de los porcentajes más bajos del mundo.
A pesar del aumento de la demanda de trabajadores, el sueldo horario promedio disminuyó en un centavo en diciembre a 25,24 dólares la hora. Es apenas la segunda vez desde el fin de la recesión que alcanza ese nivel, pero sigue por debajo de la tasa de 3.5% característica de una economía sana.
Las cifras “inmediatamente hacen desaparecer muchos de esos temores de que la economía estadounidense se desplomará debido a los problemas económicos internacionales como los de China o del Medio Oriente”, dijo Mark Vitner, economista de Wells Fargo.
Añadió que Estados Unidos “está mejor posicionado que cualquier otra economía desarrollada para soportar una crisis económica internacional”.