La especialista afirmó que el uso no es obligatorio, sino voluntario por parte de cada productor/exportadora.
Las cuatro versiones de diseños se pueden imprimir en color: verde, azul, negro y full color.
Vergara destacó que el proyecto es más cualitativo que cuantitativo y uno de los usos que determinaron se le pueden dar a los sacos es de adorno o exhibición en cafeterías o coffee shops para hacer el vínculo de origen.
También, que se usen como íconos del café de Guatemala para promocionarlo en los mercados destinos y que cada vez se recuerde la marca país.
“Más adelante podremos medir el impacto cuando se avance en la implementación del proyecto”, expresó la ejecutiva de Anacafé.
La imagen está en formato editable que puede ser ajustada de acuerdo con el tamaño del saco, pero no se puede cambiar la iconografía.
Adicional al diseño, el productor/exportadora deberá incluir en la impresión lo siguiente:
- El número de país (11)
- El número del exportador
- El número de partida
- El peso puede ir en kilogramos o libras.
Vergara explicó que uno de los diseños se puede personalizar para poder incluir los logos de las empresas.
Diferenciar el grano
Javier Cabrera, productor de la Región II de café guatemalteco, quien participó en la iniciativa enfatizó que el propósito es diferenciar el grano del país por su diversidad de aromas y calidades.
“No podemos ser un país tan diverso y rico en cultura y usar los mismos sacos que tienen todos, por lo tanto, es importante diferenciar el grano con estos nuevos diseños”, expresó Cabrera.
Dulce Romero Gerente Comercial Café Ambrosía de Guatemala comentó que todas las acciones que sean positivas para posicionar y diferenciar el café de Guatemala siempre suma, y es importante unir esfuerzos en el tema para que el grano sobresalga por su calidad y posicionamiento.
“Es bueno lo de la alianza con proveedores para que el costo de la impresión del diseño en los sacos no sea absorbido por los productores y sea un apoyo para evitar gastos adicionales”, resaltó Romero.
Luisa Fernanda Correa, gerente general de Anacafé, resaltó que existe interés entre los productores de poder unificar la imagen de los sacos y se contará con el apoyo de tres proveedores para poder facilitar la impresión de los mismos.
Correa compartió que el proyecto nació en medio de la pandemia para hacer frente a los retos que vienen en el futuro porque la proyección para la cosecha 2020-2021 es de 4.2 millones de quintales oro exportables.
Proveedores listos para la impresión
Stephane Cuchet, fundador de Soluagro, uno de los proveedores que apoyan a la iniciativa de Anacafé, explicó que el saco que se utiliza actualmente es uno de los más comunes y lleva más de 100 años de existencia.
La empresa Soluagro no cobrará adicional por imprimir el diseño que propone Anacafé, es decir, el precio promedio del saco es de Q16 para uno de 69 kilos (peso vacío del saco es de 560 gramos) y es uno de los más usados en exportación de café.
“Cada contenedor de café lleva 275 sacos y cobraremos el mismo precio del saco ya sea por uno o por cien”, afirmó Cuchet.
En los sacos también se puede imprimir la variedad del café, el proceso del secado, o si llevó un ciclo de fermentación, la información que el productor o exportador solicite, afirmó el empresario.
“Usamos la flexografía, un sistema semi automático donde los diseños van tallados en un material parecido al caucho, pero se le conoce como fotopolímeros, que son como sellos gigantes e imprime el diseño en los sacos”, explicó Cuchet.
La mayoría de beneficios secos de donde sale el café de exportación se ubican en Mixco, San Miguel Petapa, Villa Canales, y otros lugares.
Desde esos puntos se empaca el grano en los sacos y se envían al extranjero, por lo tanto, la empresa Soluagro envía los sacos ya impresos con los diseños directamente a esos centros de empaque y distribución, dado que el proceso debe ser ágil.
Aquí puede descargar los diseños y la guía de uso: