Política de inversión extranjera
El gobierno aspira a atraer US$2,700 millones en IED, mientras los empresarios piden inversión pública
El Ejecutivo presentó su programa de atracción de inversión extranjera para un portafolio de 54 proyectos, pero varios sectores critican el estado de la infraestructura nacional.
Gabriela García, ministra de Economía, el presidente Bernardo Arévalo y el viceministro Antonio Romera, presentaron la estrategia para atraer inversión extranjera. (Foto Prensa Libre: Cortesía)
Un portafolio de 54 proyectos de inversión que generarían el ingreso de unos US$2 mil 707 millones en cuatro años es el punto principal de la Estrategia Nacional de Atracción de Inversión Extranjera Directa presentada ayer por el presidente Bernardo Arévalo y las autoridades del Ministerio de Economía (Mineco).
La presentación matizó los objetivos y sectores estratégicos para modernizar la economía, con la generación de empleo como una de las prioridades, explicó el gobernante ante un grupo de empresarios y representantes del cuerpo diplomático.
¿Qué es?
La estrategia contiene los objetivos a lograr para generar inversión de alto impacto que mejore la competitividad; identifica los sectores productivos estratégicos y los mercados de compra; el impacto en la generación de empleo digno y bien remunerado; y la coordinación entre los sectores público y privado para aprovechar al máximo los tratados y acuerdos comerciales suscritos con otros bloques económicos.
La ministra de Economía, Gabriela García, presentó un “mapeo” de 54 proyectos de inversión en actividades como manufactura, agroindustria, comercio, infraestructura y servicios, por un monto proyectado de US$2 mil 707 millones, los que tendrían una cobertura de 29 subsectores.
El ingreso de esas potenciales inversiones se prevé entre uno y cuatro años, y se enlistó como posibles mercados a unos 23 países con interés de colocar sus capitales en Guatemala.
El mandatario resaltó que los esfuerzos se están reencaminando a través de la expansión de la infraestructura para el desarrollo, impulsando reformas institucionales como la ley de competencia.
“Es una visión compartida para el bienestar y prosperidad para todos los guatemaltecos y en el corazón de esta estrategia está la convicción de que podemos y debemos crear un entorno donde la inversión extranjera se convierte en un motor para el desarrollo incluyente y equitativo”, destacó Arévalo.
Los sectores opinan
En la presentación participaron representantes del sector privado organizado, quienes coincidieron sobre varios puntos a mejorar y desarrollar para atraer los capitales, sobre todo en la era del nearshoring.
Carlos Arias Bouscayrol, presidente de la comisión de Vestuario y Textiles (Vestex) de la Asociación Guatemalteca de Exportadores (Agexport), reconoció que es un esfuerzo importante como punto de partida porque hay un sentimiento de que el país cuenta con oportunidades, pero el gobierno debe mostrar un liderazgo potente e importante; y desde el sector privado, lo que busca es contribuir a que los esfuerzos sean efectivos.
A su juicio, atraer inversión es un concepto que se dice fácil, pero es complejo, y se requiere de una comunidad en la que el gobierno lleve la delantera, invite y que los inversionistas se sientan en confianza en el sentido de que Guatemala cuenta con un plan y una visión clara, para que sea atractivo venir.
“Hay muchos retos y se trabajar en ellos para demostrar a los capitalistas que se pueden hacer las cosas”.
Para Juan Carlos Zapata, director ejecutivo de la Fundación para el Desarrollo de Guatemala (Fundesa), el lanzamiento de la estrategia es un esfuerzo importante que se suma a la iniciativa Guatemala No Se Detiene para seguir reduciendo los cuellos de botella para la generación de 2.5 millones de empleos adicionales al año 2032.
Álvaro González Ricci, presidente del Banco de Guatemala (Banguat), afirmó que desde el 2020, se ha venido generando más IED y para este año se proyectan US$1 mil 650 millones y para el 2025 US$1 mil 850, por lo que es una tendencia positiva, pero no es suficiente para lo que necesite el país, ya que Costa Rica y República Dominicana, están pasando de US$4 mil millones anuales.
Recalcó que, al aumentar la IED, se generarán mayores tasas de empleo formal, mejores remuneraciones, más recaudación tributaria y evitar que las personas migren a buscar oportunidades fuera del país. “Contar con esta ruta definida es sumamente importante, porque ya hay una lista de inversionistas”.
Retos y desafíos
Carmen María Torrebiarte de Amador, presidenta del Comité Coordinador de Asociaciones Agrícolas, Comerciales, Industriales y Financieras (Cacif), aseguró que contar con esta política ayuda a ir alineando los pasos que está siguiendo el gobierno para trabajar en conjunto, pero también se necesita atender varios temas en el corto plazo.
Citó como ejemplo, el tema de APM Terminals y la Empresa Portuaria Quetzal, que debe resolverse porque los inversionistas querrán traer sus materias primas, pero los puertos están colapsados; también atender los problemas de las carreteras porque faltan tramos para movilizarse, aparte de la situación del aeropuerto.
“Esta es parte de la infraestructura que el país necesita para atraer esa inversión, pero no se puede duplicar la carga en carreteras ni los movimientos en los puertos porque todo está topado”, puntualizó.
Arias Bouscayrol afirmó que la infraestructura y la oferta de energía eléctrica son retos pendientes, “pues para nadie es sorpresa que en Guatemala hay un estrés en el sistema eléctrico, portuario y vial, lo que es la tarea pendiente como país. Si no le entramos a la infraestructura, será muy difícil que la parte productiva logre crecer, y un inversionista le presta mucha atención a este aspecto”.