Para esa modalidad se crearon dos regiones, conocidas como Circunscripción Económica Uno (CE1), que se conforma con el departamento de Guatemala, y la Circunscripción Económica Dos (CE2), que incluye al resto del país.
Derivado de ello, se establecieron en enero del 2022 seis comisiones paritarias porque para cada región se deben integrar tres: una para actividades no agrícolas; otra para agrícolas; y una más para actividades de exportación y maquila.
Aunque se aprobó en ese mismo mes quiénes la integrarían, a la fecha la mayoría ha efectuado solo una o muy pocas reuniones, mientras que otras no han avanzado porque no se han integrado en su totalidad o por cuestiones de cuórum.
La semana pasada hubo una reunión ampliada entre la CNS y las paritarias, en la que se hizo una presentación acerca de la normativa legal sobre cómo se deben integrar la CNS y las paritarias, las obligaciones de estas, las normativas para su funcionamiento y sedes para reuniones.
Además, se habló de una propuesta para reformar el Acuerdo Gubernativo 1319, que contiene el reglamento de las comisiones sobre aspectos de sedes, períodos de sesiones, nombramientos y emisión de informes.
La representante por el sector gubernamental es la viceministra de Administración del Trabajo María Isabel Salazar, quien según participantes en la reunión, recomendó basarse en datos y cifras económicas y de empleo para proponer el incremento (o no) al salario mínimo. Entre estos pueden ser la medición de empleo, la formalidad e informalidad, la inflación, el crecimiento económico y otros datos.
¿Qué sucede?
Guido Ricci, delegado del sector patronal en la CNS indicó que la idea era poner sobre la mesa los fundamentos legales y lo que se espera de cada comisión, pues la percepción es que hay algún grado de desconocimiento sobre lo que se debe hacer. Esto, a pesar de que corre el tiempo para presentar el informe en septiembre próximo y cumplir con el encargo que se asigna a cada comisión “y el problema es que algunas de las paritarias no se han reunido, según nos informaron”.
Al ser consultado si como sector ya están definidos los indicadores a analizar para discutir un salario por circunscripción, expresó que eso es lo que está pendiente de discutir en la CNS, y también está pendiente dentro del sector patronal. Tampoco se ha acordado si habrá un aumento al salario mínimo.
El representante patronal en la paritaria de actividades de exportación y maquilas (29-89), Alejandro Ceballos, indicó que los han convocado solo a una reunión informativa en esa comisión, pero si las paritarias no avanzan, el gobierno tomará una decisión de última hora.
A su juicio, en 2023 sí debe aumentar el salario mínimo, debido al alza de precios, lo cual redundaría en que las familias mantengan su consumo y a la vez dinamicen la economía.
En tanto, Franky Pozuelos, delegado de sector laboral en la CNS, indicó que aunque han conocido varios indicadores de empleo y trabajo, hace falta definir sobre cuáles se debe estimar el salario. A su criterio, se debe modificar una fórmula de cálculo que en otros años se ha explicado pero no se ha usado, porque debido al aumento drástico de precios de la canasta básica ampliada (alimentos, vestuario, transporte, y otros), se necesita brindar más ingresos a las familias.
También coincidió en que no hay avances en la comisiones paritarias y que en la CNS solo se han realizado reuniones informativas, por lo que hace falta definir indicadores.
Aunque se le ha solicitado información en reiteradas ocasiones, el Ministerio de Trabajo y Previsión Social (Mintrab) no ha respondido a los requerimientos y de la oficina de comunicación social se indicó el martes pasado que no se está negando información, sino que “la agenda ha estado bastante ocupada”.
Indicadores: Información desactualizada
Según Jorge Benavides, analista de la Fundación para el Desarrollo de Guatemala (Fundesa), el fundamento de tener salarios mínimos por circunscripciones económicas es que la realidad nacional es diferente, debido a que el promedio resulta sesgado por los datos de la ciudad capital, que es el área más poblada del país y con mayor movimiento económico.
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Al proponer la modalidad de circunscripciones, había el compromiso de que dos entidades debían generar información económica del país a nivel subnacional: el Mintrab y el Instituto Nacional de Estadística (Ine).
Pero el Mintrab toma la información del Instituto Guatemalteco de Seguridad Social (IGSS) y los datos clave están en el número de afiliados por actividad económica y cuánto es el salario promedio, para ver la diferencia con el salario mínimo y número de patronos, en especial nuevos, que son los que se van a estar inscribiendo.
La segunda entidad, el Ine, tiene dos estadísticas, una es Encuesta Nacional de Empleo e Ingresos, donde se puede analizar información de la formalidad, además de la participación por edad, género, etnia y grupo lingüístico, que pueden ayudar a entender esas diferencias de la población; y la otra fuente es la producción de las distintas áreas del país, lo cual recaba a través de la Encuesta Nacional Agropecuaria y la Encuesta de Condiciones de Vivienda (Encovi). Sin embargo, el problema es que no hay datos actualizados.
Tomando en cuenta esto, las paritarias no tienen mucha información, o por lo menos actualizada, aunque también podrían utilizar información de la Superintendencia de Administración Tributaria (SAT), lo que las comisiones no la han considerado.
Verificarán al sector informal
En esa reunión los funcionarios también comentaron que por primera vez se verificará el cumplimiento del pago del salario mínimo en el llamado sector informal, como parte de los operativos de la Inspección General del Trabajo (IGT).
Se argumenta, según el Mintrab, que en las verificaciones al sector formal se ha detectado que el sector privado sí paga el salario mínimo, por lo que el incumplimiento ha recaído en quienes trabajan por cuenta propia y no están inscritos en la SAT.
Ricci dijo que el sector patronal apoya las verificaciones para el cumplimiento de la ley dentro del sector formal o informal. Mientras que Ricci y Benavides consideran que será una tarea difícil por el alto grado de informalidad de la economía. Al Mintrab se le requirió información también sobre la cantidad de inspectores con los que cuenta, pero tampoco respondió.