La proyección de ingresos será de Q58 mil 300 millones y no Q57 mil 100 millones, como se había pronosticado a principio de la pandemia.
La nueva variación significa una recuperación de Q1 mil 200 millones, al planteamiento anterior.
El ministro reconoció que la brecha se mantendrá en los Q6 mil 200 millones al cierre del año.
Hasta septiembre, la brecha fiscal — impuestos programados, pero no recaudados — era de Q4 mil 831 millones, resaltó el funcionario en una citación en el Congreso.
Esta semana, las autoridades monetarias informaron que la economía estaría cerrando en -1.5%, y algunos sectores productos han mostrado un mejor desempeño y que fueron revisados al alza.
En junio pasado, el crecimiento se había estimado en -2.5% pero fue revisado a -1.5% el pasado 13 de octubre.
Saúl Figueroa, viceministro de Finanzas, subrayó que en el 2020 se realizaron cuatro ajustes a la tasa de crecimiento económico en diez meses.
Explicación
Marco Livio Díaz, jefe de la SAT, reiteró que la brecha fiscal acumulada a septiembre del 2020 llegó a Q4 mil 605 millones la brecha.
De esta cifra la brecha más importante se encuentra en impuestos al comercio exterior por Q2 mil 119 millones y el impuesto sobre la renta (ISR) la brecha es de Q598 millones, además Q1 mil 010 millones en el impuesto al valor agregado (IVA), otros Q211 millones en impuesto de distribución por derivados del petróleo (IDP).
Además, Q115 millones en timbres; Q256 millones en impuesto sobre circulación de vehículos (ISCV) y Q204 millones en el impuesto de primera matrícula (Iprima).
Explicó que solo a septiembre la brecha fue de Q142 millones, y esos refleja una mejora en el comportamiento de recaudación con especto a meses anteriores, cuando la brecha fue mayor.
Estimación 2021
El ministro informó que con las nuevas estimaciones de crecimiento económico para 2021 que se calcula en 3.5% —positivo— se están recalculando los ingresos tributarios, ya que sugiere una recuperación de la producción nacional luego de los efectos del covid-19.
Las cifras preliminares indican que la recaudación para el siguiente año sería de Q63 mil 500 millones, y no los Q61 mil 400 millones que se habían proyectado.
Díaz precisó que aún no se han terminado de hacer los estudios “ya que es muy reciente la publicación de las nuevas perspectivas y la estructura tributaria del país no responde solo a un crecimiento macroeconómico, sino que hay muchos factores que afectan la recaudación y se deben tomar en cuenta”.
“Se debe tomar en cuenta que las ventas de las compañías han sido menores algunas tuvieron cierres parciales y otras totales, debido a las restricciones para contener el coronavirus, pero por ejemplo el impuesto de solidaridad (ISO) se basa en los resultados de las empresas de un año anterior, por lo que, explicó, aunque la economía podría mejorarse en el 2021 pero la base de ese tributo va a ser más rebajada”, puntualizó.