Economía de Guatemala creció 3% en julio impulsada por importaciones con un leve riesgo de caída en exportaciones

El reporte oficial indica que la actividad económica medida por el Imae, registró un crecimiento del 3% en julio, mientras que en julio del 2023 fue del 5%. El informe, precisa que el resultado de julio fue influenciado, por el desempeño positivo de actividades como comercio y reparación de vehículos; actividades inmobiliarias; actividades financieras y de seguros; información y comunicaciones e industrias manufactureras.

Entonces, el crecimiento acumulado a julio es de 3.4%, según las cifras, y el Imae tiene tiene como función medir el desempeño real de la economía en el corto plazo. En lo que va del año en enero y mayo el indicador se ubicó en 4.4% que han sido los más altos y en marzo en 2.4% que es el más bajo, según la serie.

Álvaro González Ricci, presidente del Banco de Guatemala (Banguat) detalló que la producción al situarse con una variación acumulada de 3.4%, “es congruente con la estimación de cierre del crecimiento económico de este año en un rango entre 2.5% y 4.5%, con un valor central de 3.5%” a diciembre 2024.

Resultado congruente

Raúl Bouscayrol, presidente de la Cámara de Industria de Guatemala (CIG), comentó que la variación interanual del Imae al mes de julio, del 3.4%, presenta una leve desaceleración con relación al mismo mes del año anterior, es bastante congruente con el potencial de crecimiento que tiene Guatemala.

“Las industrias manufactureras tuvieron un desempeño positivo, lo cual refleja la resiliencia de las industrias en el país, a pesar de los retos enfrentados en el mes de julio, como el socavón del Km. 44 de la carretera Palín-Escuintla que empezó a afectar desde mediados de junio y los retos logísticos en materia portuaria”, expresó.

Bouscayrol agregó que hay factores que están limitando el potencial de crecimiento, como lo es la infraestructura vial y la situación en los puertos, especialmente en el océano pacífico.

Predomina efecto de cambio climático

Otro de los indicadores que conoció la JM fue el desempeño del comercio exterior (exportaciones e importaciones), en la cual ya se perciben efectos del cambio climático en la actividad agroexportadora.

Las exportaciones en general a julio se situaron en US$8 mil 638.3 millones, lo que significa una caída -0.9% con respecto al mismo periodo del año pasado, cuando se situaron en US$8 mil 720.3 millones.

Al respecto González Ricci, apuntó que las exportaciones mostraron una reducción de -0.9%, que aún en terreno negativo muestran una recuperación respecto del año anterior donde las exportaciones cayeron -9.4%.

“Las exportaciones han mostrado un menor crecimiento particularmente en el azúcar y en grasas y otros combustibles, este último asociado al aceite de palma, en ambos casos las producciones han sido afectadas por factores climáticos”, anotó el presidente de la banca central.

Las ventas al exterior siguen lideradas por artículos de vestuario por US$940.7 millones; café US$691.2 millones; banano US$561.6 millones; azúcar US$475.3 millones y grasas y aceites comestibles -que en su mayoría proviene de la palma- US$379.3 millones.

Con respecto a las importaciones mostraron un crecimiento de 6.6%, al ubicarse en US$18 mil 645 millones, o sea US$1 mil 152.4 millones más que lo registrado en julio del año pasado, cuando fue de US$17 mil 492 millones.

Proyecciones en aceite de palma

Al consultar a José Santiago Molina, presidente de la Gremial de Palmicultores de Guatemala (Grepalma), explicó las razones del por qué se ha reflejado una disminución en las exportaciones está relacionado a los efectos este año del fenómeno de el Niño.

Las cifras oficiales indican que hay una caída en las divisas por exportaciones de aceite de palma del 39%, ya que a julio de este año se computaban US$379 millones, mientras al mismo período del 2023 el monto era de US$625 millones.

El directivo, aseguró que en términos generales por el fenómeno de el Niño hubo menos fruta y menos extracción, en el periodo comprendido de enero a mayo asociado a un déficit hídrico, y que provocó a su vez el aborto de plantaciones, por lo que también puede comprometer la producción para uno o dos años siguientes.

Entonces, al haber menos fruta y extracción, se prevé una menor producción, en esa parte.

En junio y julio ya se han presentado lluvias, y en agosto las condiciones fueron ya normales. Para el caso de las plantaciones de la Costa Sur, ahí hay sistemas de riego, por lo que afectación ha sido menor en comparación del norte.

Molina aseguró que hay una merma en las exportaciones al haber una menos producción, pero aclaró que se garantiza el suministro para el mercado local.

Las estimaciones indican que para este año habrá una menor producción de alrededor del 20% asociado por el fenómeno de el Niño, y las estimaciones apuntan aun producción de unas 800 mil toneladas de aceite de palma, de las cuales unas 200 mil son para atender la demanda interna y otras 600 mil toneladas se destinarán para la exportación.

La producción en otros años ronda cerca del millón de toneladas de aceite de palma, pero que en este año habrá una reducción, e impactará en las exportaciones.

Contexto internacional

Dentro de los análisis que conoció la Junta Monetaria (JM) está el contexto internacional, sobre todo lo relacionado al desempeño de la economía de los Estados Unidos, que es el principal socio comercial de Guatemala.

“En el contexto internacional, se mencionó cómo va el proceso eleccionario en los Estados Unidos de América en donde según las encuestas los dos candidatos más importantes, Kamala Harris y Donald Trump, se encuentran prácticamente en un empate técnico; se indicó que la situación fiscal expansiva en los Estados Unidos de América se anticipa que no cambiaría mucho a los próximos tres años, esto sobre la base de la reciente revisión de la calificación crediticia por parte de Fitch Ratings, que mantuvo la calificación de los Estados Unidos en AA+ con perspectiva estable”, concluyó González Ricci.