Economía

Cultivadores de camarón se quedan sin producto

Los que tuvieron suerte pudieron degustar camarones como un platillo tradicional de Semana Santa, pero muchos guatemaltecos se perdieron esa dicha, debido a la alta demanda del producto y el retraso en la entrega de las larvas para la nueva cosecha.

Pescadores de camarón marítimo dejaron de trabajar desde Miércoles Santo, lo que constituyó uno de los factores que contribuyeron a la escasez de producto. (Foto Prensa Libre: A. Interiano)

Pescadores de camarón marítimo dejaron de trabajar desde Miércoles Santo, lo que constituyó uno de los factores que contribuyeron a la escasez de producto. (Foto Prensa Libre: A. Interiano)

Los productores informaron que uno de los principales problemas que afrontaron fue el retraso en la entrega de larvas para nueva cosecha, lo que causó escasez de camarones de buen tamaño para vender en esta época, que es la de mayor consumo.

La escasez incrementó el precio del camarón en Q5 y Q10 por libra. El grande llegó a cotizarse en Q35 la libra y el jumbo incluso alcanzó los Q60.

Juan Carlos Bolaños, productor de camarón de la Costa Sur, informó que la mayoría de cultivadores empezó el ciclo de cosecha a mediados de febrero; es decir que a dos meses de que comenzó el ciclo de cultivo no había disponibilidad de los crustáceos de talla comercial.

“Durante la Semana Santa, los camarones se encontraban entre 7 y 10 gramos, que es una talla pequeña”, explicó Bolaños.


El retraso en la entrega de larva impidió el crecimiento de los camarones, dado que los productores en la actualidad deberían contar con producto de entre 10 a 12 gramos o más, porque son los codiciados tanto en el ámbito local como internacional.

“El poco camarón de cultivo que había se terminó el Martes Santo, entre los revendedores”, dijo el productor.

Bolaños agregó que cuando empezó la Semana Santa hizo un sondeo entre productores locales y ninguno tenía producto de más de ocho gramos, y quien lo tuvo lo vendió así.

Sin embargo, según Bolaños, el mercado local no quedó desabastecido, ya que intermediarios congelaron producto en diciembre pasado y aprovecharon a venderlo en época de escasez, “a pesar de que es algo incierto y riesgoso”.

Por aparte, los pescadores de camarón en el Puerto de Iztapa reconocieron que a pesar de que este año la pesca de camarón marino fue estable, hubo escasez porque las camaroneras no salen a pescar desde Miércoles Santo.

“Aparte de que el tiempo de abundancia del camarón es entre septiembre y noviembre”, agregaron los pescadores.

Las especies que más se atraparon en Semana Santa fue el camarón café y el cristalino, que llegan a abarcar 15 unidades por libra.

Al consultar al Ministerio de Agricultura, Ganadería y Alimentación (Maga) si habían recibido algún reporte de escasez de camarón, encargados del Departamento de Comunicación informaron que hasta ahora no habían recibido ninguna alerta de baja en la producción camaronera del país.

millones anuales se generan aproximadamente en divisas por exportación de camarón a diferentes mercados internacionales.


Según registros del Maga, 40 empresas abastecen al mercado guatemalteco, aparte de que el país importa aproximadamente 12 mil toneladas al año de camarón de Argentina, Ecuador, Perú, Nicaragua, Costa Rica, Belice y Vietnam.

Incentivan cultivos

Alexander Debeaset, gerente de Producción y de Encadenamientos de la empresa exportadora de camarón Acuamaya, comentó que existen más personas interesadas en unirse a la industria camaronera.

En la actualidad son más de 81 productores independientes que abarcan el 40% de la productividad nacional.

“Están construyendo piscinas por toda la costa y los encadenamientos apoyan con entrega de semillas y capacitaciones”, refirió el ejecutivo.

llegó a cotizarse la libra de camarón jumbo en época de Semana Santa, debido a la escasez del producto.


Gabriel Biguria, gerente general de Acuamaya y director de la Comisión de Pesca de la Asociación Gautemalteca de Exportadores, afirmó que existe mayor incentivo para cultivar camarón.

“La parte más importante es la producción de camarón local y es la que más potencial tiene de crecimiento, de generar empleo y desarrollo económico”, señaló el exportador.

Otro incentivo es que existe más apertura de financiamiento para que los pequeños cultivadores cuenten con todos los elementos necesarios para la producción.

En el corto plazo se espera que más productores puedan empezar a exportar y agreguen valor agregado a los productos.

El cultivador de camarón Juan Carlos Bolaños indicó que, junto con autoridades de la Dirección de Normatividad de la Pesca y Acuicultura del Maga, visitarán varias plantas de procesamiento que se encuentran abandonadas, en Iztapa, para evaluar la posibilidad de que quienes lo deseen puedan trabajar de manera tercerizada en añadir valor agregado al producto como precocido y pelado, sin cabeza o incluso empanizado.

ESCRITO POR:

Natiana Gándara

Editora de Economía en Prensa Libre, con más de 15 años de experiencia en medios radiales, televisivos, impresos y digitales.

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