La medida busca que los plásticos cuenten no sólo con el sistema de bandas magnéticas sino también con un chip.
Si bien se estableció el 1 de enero de 2016 como la fecha para iniciar el proceso, un sondeo realizado por la Asociación Bancaria Costarricense (ABC) , confirma que el 95 % de las entidades ya pusieron en marcha el plan de sustitución.
José Ignacio Cordero, portavoz de la Asociación Bancaria Costarricense (ABC) , señaló en declaraciones públicas que “el sistema con banda magnética resultó vulnerable ante la habilidad de los delincuentes, que han desarrollado tecnología para leer el número de tarjeta con el objetivo de clonarla (skimming)” .
El chip, por el contrario, “ofrece una encriptación dinámica; es decir, guarda los datos codificados y emite un código diferente en cada transacción que se hace. Esto permite mejorar la seguridad en las transacciones, ofreciéndoles mayor tranquilidad y confianza a los clientes al usar sus tarjetas” , dijo.
El chip no sustituirá las actuales bandas magnéticas, sino que ahora se contará con ambos sistemas, esto en razón de que en algunos países no aceptan el circuito electrónico, de manera que el usuario no tenga problemas para usar su tarjeta en el extranjero, según la ABC.