En tanto la inscripción de comerciantes individuales cayó 22.3% y solo se registraron 9 mil 632.
El auditor Óscar Chile Monroy, de la firma MGI Chile Monroy y Asociados, y el analista económico de la Central American Business Intelligence (Cabi), Ricardo Rodríguez indican que este comportamiento es congruente por la coyuntura económica y restricción de a locomoción y de actividades decretadas por el gobierno con el fin de contener el coronavirus.
El auditor indica que se han aplazado decisiones y aunque algunos habían empezado procesos para constituir una empresa prefieren esperara que cambie el panorama.
Agregó que en la firma de auditores prestan servicio a un cliente que desde noviembre tiene interés de constituir una empresa pero ha preferido esperar. No descartaría la posibilidad de que al quedar liberadas las restricciones se experimente un incremento inusual de inscripción de empresas, de planes que quedaron postergados.
Las decisiones postergadas también se reflejan en el cierre de empresas que cayeron 38.9%
Las caídas más grandes en inscripción de empresas se muestran en abril cuando llegó a significar -70%, pero en mayo y junio, aunque los datos no llegan a niveles del 2019, muestran una mejoría respecto abril.
Un comportamiento similar reporta la inscripción de comerciales individuales.
Rodríguez comentó que el comportamiento en abril pudo verse influido, en que, aparte de ser el primer mes completo de restricciones de muchas actividades económicas, también pudo tener un comportamiento estacional.
El Registrador Mercantil José Adolfo Flamenco dijo que desde enero a la primera quincena de marzo el número de inscripciones llevaban un promedio de 10% de crecimiento con respecto del 2019.
Sin embargo a partir de la segunda quincena de marzo ese número ha ido a la baja ya que del 17 de marzo al 13 de abril el Registro estuvo cerrado, en la actualidad opera parcialmente actividades presenciales y con algunos empleados en teletrabajo. En mayo y junio se vio un mejor comportamiento que meses anteriores pero se mantienen abajo que en el 2019.
Chile Monroy dijo que así como hay suspensión de labores en varios sectores que afectan a diferentes decisiones empresariales o proyectos emergentes que se aplazan, también están surgiendo otros negocios que se adaptan al tipo de demanda que hay en esta coyuntura por lo que cree que también se han inscrito algunas empresas o comerciantes nuevos.
Se ha visto surgir negocios de venta de mascarillas, caretas, productos de limpieza o alimentos y otros productos a domicilio expuso Chile Monroy. Rodríguez dijo que ha solicitado productos en línea y todos le han dado factura, además hay otros que no necesitan inscribir una empresa porque son pequeños contribuyentes, aunque también dijo que según análisis que han efectuado está surgiendo más informalidad.
Rodríguez menciona que otro punto que puede estar influyendo es que muchas personas prefieren no visitar las instituciones, para hacer trámites con el fin de evitar riesgos de contagio por lo que aplazan el proceso.
Recientemente Jonathan Menkos, director ejecutivo del Instituto Centroamericano de Estudios Fiscales (Icefi) mencionó que aparte del impacto económico que ha significado esta crisis, también existe incertidumbre acerca de ejecutar proyecto porque cada cierto tiempo se cambian medidas de restricción, se aplaza la posibilidad de una apertura de actividades limitadas y ya se ha aplazado en varias ocasiones las estimaciones de las autoridades de salud respecto de cuándo será el pico de contagios del covid-19.
José Rivas, director ejecutivo de Asegua dijo que en marzo hicieron un sondeo y el de 63% de emprendedores dijo que de alargarse el plazo de restricciones iban a quebrar o tenían que reinventarse con nuevos productos o cambio de giro de negocio.
Expuso que según el sondeo que hicieron muchos emprendedores tienen la intención de formalizarse, sin embargo en el caso de crear sociedades de emprendimiento tienen la complejidad de que se tiene registrar una innovación del producto o servicio, por lo que muchos proyectos se han quedado estancadas en ese proceso.
Agregó que han observado que han surgido muchos emprendimientos y negocios en esta coyuntura ante la necesidad de obtener ingresos, pero para un emprendedor es caro inscribir una sociedad anónima o empresa mercantil.
En el plazo del 15 de marzo al 7 de julio de este año el país ha perdido 103 mil 992 empleos y ventas por US$2 mil 101 millones (unos Q16 mil 281 millones en ventas) según las estimaciones del Comité Coordinador de Asociaciones Agrícolas, Comerciales, Industriales y Financieras (Cacif) incluidas en el estudio Impacto del confinamiento.
