Economía

Coronavirus: Cómo anticiparse a la pandemia ayudó a prevenir riesgos en el sector de palma

Elevar los controles de bioseguridad bajo medidas estrictas de inocuidad fueron claves al momento en que se presentó el primer caso de coronavirus en el país.

Socios de Grepalma adoptaron protocolos de prevención y mitigación del covid-19. Las bitácoras de registro para la trazabilidad de los colaboradores han sido fundamentales. (Foto Prensa Libre: cortesía Grepalma)

Socios de Grepalma adoptaron protocolos de prevención y mitigación del covid-19. Las bitácoras de registro para la trazabilidad de los colaboradores han sido fundamentales. (Foto Prensa Libre: cortesía Grepalma)

La pronta reacción y preparación ante el inminente ingreso de la pandemia a Guatemala ayudó a que hasta la fecha no se haya presentado ningún caso positivo del nuevo coronavirus en las empresas que integran la Gremial de Palmicultores de Guatemala (Grepalma).

Karen Rosales, directora ejecutiva de Grepalma, conversó con Prensa Libre y compartió cuáles fueron las  prácticas que implementaron, incluso antes de que se presentara el primer caso de covid-19 en el país.

Producción estable

Rosales afirmó que para este año se mantiene la producción de aceite crudo de palma en 863 mil toneladas métricas, que fue el cierre del 2019.

En cuanto a las exportaciones, proyectó que podrían bajar entre un 10 y 15%.

¿Cómo decidieron implementar protocolos de bioseguridad antes de que llegara la pandemia?

El primer caso lo confirmaron el 13 de marzo y desde Grepalma y los socios ya habían comenzado a aplicar algunas medidas de bioseguridad, basados en las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS). Desde finales de febrero  se colocaron afiches con información e infografías sobre la enfermedad, desde las áreas de cultivo y administrativas, y se tradujo a idioma q’eqchi’.

¿Es decir que la implementación de protocolos no los tomó por sorpresa?

Exacto, no nos tomó por sorpresa, porque como sector estamos acostumbrados a tomar medidas que nos permitan determinar trazabilidad, registros. No es un proceso sencillo, pero la reacción fue rápida, fuimos los primeros en establecer un protocolo para la prevención y mitigación de covid-19 en el sector palmicultor. También se elaboró una guía de buenas prácticas de prevención y mitigación,  el manejo de un caso sospechoso y un manual para el manejo de comunicación interna y externa, y poder estar preparados.

¿Qué medidas que incluye el protocolo?

Por ejemplo, llevamos una bitácora y registro de todas las acciones. La toma de temperatura del personal lleva un registro y trazabilidad, se diseñaron nuevas estaciones de lavado de manos, instalación de equipo de higiene, adaptar las instalaciones y vamos de la mano, también, con lo que dictan las disposiciones presidenciales.

Medidas de distanciamiento social y toma de temperatura en campos de palma. (Foto Prensa Libre: Cortesía)

¿Llegó algún momento en que se toparon con algún tema de escasez o acaparamiento de insumos, debido a la emergencia?

Al principio tuvimos algunas dificultades en la cadena de suministros que eran necesarios para poder implementar las acciones del protocolo de bioseguridad, pero luego se fueron normalizando.

¿El ingreso de la pandemia afectó la producción?

Un 80% de los cultivos de palma de aceite penden de la lluvia, y cuando ingresó la pandemia estábamos en temporada baja, y eso fue una ventaja; por lo tanto, no hemos tenido ningún efecto negativo en temas de producción.

¿Han tenido dificultad en el traslado de  materia prima?

Lo que nos afectó en algún momento fueron disposiciones que nos impedían el traslado de la fruta o del personal que debía  llegar a las instalaciones, pero hemos tenido una incidencia ágil en poder comunicarnos con líderes comunitarios, municipalidades, gobernaciones y poder explicar que el sector palma  también forma parte esencial de la agricultura.

¿Por qué el sector de palma es esencial?

El sector de palma es esencial porque produce materias primas para la fabricación de alimentos y también es base para producir jabones y productos de higiene, que en estos momentos son tan importantes.

¿Cómo ha afectado la pandemia los precios internacionales del aceite de palma?

Por ser el aceite de palma una materia prima que se cotiza en bolsa, la pandemia ha afectado en un 36% los precios. El año pasado hubo meses complejos, pero se logró cerrar en US$770 la tonelada de aceite crudo de palma. Enero arrancó bien, en US$830, y luego a mayo cayó a US$531, afectados por baja en la demanda a nivel internacional.

¿Cómo proyectan las exportaciones para este año?

Este comportamiento es normal en el sector. En el primer semestre el sector exporta el 30% de su producción anual. Cotejando datos con el Viceministerio de Comercio Exterior del Ministerio de Economía, a febrero hubo una baja de un 25%, el consumo en Europa bajó y afectó. No hemos tenido cancelaciones de contrato, sino pausas o demoras, entonces estimamos que se pueden reducir las exportaciones entre un 10 y 15%.

¿Y cómo visualizan  la producción?

La producción se va a poder mantener en 863 mil toneladas métricas de aceite de palma, que fue el cierre del 2019, y esperamos esa misma cantidad para este año.

¿Por qué es positiva la producción?

Las operaciones del sector han permanecido. Segundo, el buen pronóstico de lluvias, y tercero que tenemos el recurso humano. Hasta la fecha el sector ha mantenido a su personal completo, activo y operando.

Personal encargado del manejo del cultivo de palma adopta las medidas de bioseguridad para prevenir el covid-19. (Foto Prensa Libre: Cortesía)

Cuando empiece la cosecha ¿contratarán más personal?

Así es. En pocos días se abren nuevas oportunidades de trabajo para el otro semestre y se aumenta entre un 20 y 30% más la contratación de personal.

¿Han pensado de alguna manera en aprovechar el mercado local?

Es un buen momento para poner sobre la mesa el tema de los biocombustibles y poder desarrollarlo en el país, y dar un paso en reducir la emisión de gases de efecto invernadero, es un potencial del sector, que ahí está, aún dormido, y puede ser una gran oportunidad.

ESCRITO POR:

Natiana Gándara

Editora de Economía en Prensa Libre, con más de 15 años de experiencia en medios radiales, televisivos, impresos y digitales.