El ejecutivo precisó que el sector industrial se encuentra preparado para la apertura de la economía, así como la operación de las empresas, con la implementación de protocolos.
“Estamos hablando de una nueva economía de distancia”, aseguró el directivo.
Proceso gradual
Asturias, sugirió que todo proceso de reapertura económica debe ser gradual, ordenada y correcta, para evitar ondas de contagio, y que se obligue a cerrar de nuevo las actividades.
Para llevar a cabo la reapertura económica, la Coprevid llevará a cabo una serie de acciones con las cámaras y gremios empresariales, con protocolos para evitar contagios a nivel de sus empresas; para ello hay una serie de indicadores que se han desarrollado.
“La reapertura debe ocurrir basado en un pacto económico, social y el riesgo de contagio, porque no todos los sectores son iguales y es importante saber, que, algunos tienen más riesgo de contagio que otros”, afirmó Asturias.
Explicó que con la Universidad del Valle de Guatemala y el Incae están trabajando en la sectorización y priorización de las actividades, y determinar qué sectores son más peligrosos o que representan riesgos en términos sanitarios, y cuáles no son tan peligrosos.
“Tenemos que estar claros que no todos los sectores tienen el mismo riesgo sanitario”, afirmó el director, al citar como ejemplo que el transporte es uno de alto riesgo, y será uno de los últimos en reactivarse, pero tiene una importancia estratégica como un servicio esencial para la movilización de personas.
Recordó que los ensayos del Transmetro y Transurbano, pero en el caso de los buses rojos, sería un proceso imposible de abrir si este segmento no se transforma y evoluciona para poderse reactivar.
Sectores
Asturias enfatizó que la pandemia por el número de casos está concentrada en el departamento de Guatemala, donde están dirigidas las restricciones más fuertes por la intensidad de los casos, pero no significa que se pueda tratar al resto del país de la misma manera.
“Esto será importante y vital para la desescalada y todo el país no tiene que sufrir las restricciones”, afirmó, al mostrar un mapa de Guatemala sobre los reportes de los casos.
El director aseveró que eso conllevaría a poder reactivar las economías en áreas en donde la curva empiece a descender, sin tener que esperar en todo el país, pero reiteró la importancia en atender el nivel local y el control de estos brotes.
Situación actual
Una de las preguntas de los empresarios de la CIG, es conocer la situación actual de la pandemia y Asturias reiteró que Guatemala se encuentra en la etapa de alto contagio.
“Estamos en la etapa de la cresta de contagios de coronavirus, y la pregunta cuánto tiempo vamos a permanecer acá”, afirmó.
Compartió la experiencia de otros países donde “la población es muy disciplinada, todos los actores hacen el esfuerzo al mismo tiempo, que logra la cresta ocurra dos o tres semanas y comience la disminución del número de contagios”.
A ese respecto subrayó que la población y las empresas se alinean y todo el mundo tiene claro que se debe hacer que permite una disminución de contagio.
Recordó que lo a que ha movido el distanciamiento social en Guatemala más disciplinado es el miedo, pero debe pasar de ese miedo a un cambio de comportamiento.
Listado de actividades
Zepeda planteó un ejercicio al doctor Asturias en las fases de las actividades productivas; en la clasificación hay etapas cero, uno, dos y tres.
En el caso de los restaurantes potencialmente podrían comenzar a trabajar con una modalidad de pasar a recoger los alimentos y estaría en una fase cero.
Además, en una fase uno con aforo, pero todo dependerá de la capacidad del restaurante en mantener la distancia social, sistemas de ventilación, evitar los aires acondicionados y que tenga más atención afuera que dentro del establecimiento.
Es una actividad que podría irse reactivando gradualmente en las fases de desescalada, precisó Asturias.
Los centros comerciales pueden empezar en la fase cero, con un proceso de compra para recoger, y para algunos centros que están más organizados en sus procesos en la fase uno.
En los colegios, los calificó como fase tres y es considerado como un sector difícil que pueden aumentar los contagios.
Con relación a las maquilas, si cuentan con los sistemas de protección pueden reactivarse en fase uno en una manera escalonada.
“Lo que menos queremos es que en una maquila se active y resulte en brote o contagio que la llevaría en cerrarse por completo”, enfatizó.
En el caso de las operaciones del Aeropuerto Internacional La Aurora, podría abrirse antes, y en el caso de las fronteras se debe contar con una capacidad de diagnóstico importante, ya que en este momento son focos de contagio.
El objetivo es mantener la actividad económica sostenida, y no estar cerrando y abriendo, puntualizó Asturias a los empresarios de la CIG.