La capacidad de innovación de una empresa es importante para definir el valor de la misma, y ante esta realidad, las empresas establecidas se encuentran en una desventaja frente a las Start Ups. “Usualmente son las empresas emergentes los que logran desarrollar nuevos productos y mercados”, explicó Magendzo.
En este sentido, Sorgente añadió que esto se debe a que las Start Ups, debido a su tamaño, ausencia de una cultura organizacional estática y apertura a explorar nuevos modelos de negocios, cuentan con mucha agilidad y toman los riesgos de formas más aventurada.
Sorgente y Magendzo coinciden en que las empresas establecidas pueden crear sinergias importantes con Start Ups. Se benefician mutualmente, las empresas establecidas pueden aprender de la rapidez de una Start Ups y a su vez estos emprendimientos emergentes pueden beneficiarse de la cartera de clientes y el capital con el que cuentan las compañías más experimentadas.
Respecto a cómo se puede comenzar una colaboración entre Start Ups y empresas establecidas, Magendzo recomienda pensar en un nuevo modelo para la gestión. Seguiré localizar ideas con potencial y luego desarrollarlas fuera de la empresa madre, también es viable destinar fondos para capital de riesgo.
