Las relaciones comerciales entre Guatemala y Estados Unidos se han consolidado durante los últimos 20 años y la balanza muestra un crecimiento positivo en el intercambio de bienes y servicios. Reitera la dependencia de la economía guatemalteca con este país socio.

Fue un 5 de agosto del 2004 cuando en Washington D.C. se llevó a cabo la suscripción del Tratado de Libre Comercio (TLC) entre Estados Unidos y Centroamérica, de eso ya se cumplirán 20 años.

Ahora, hay una relevancia de la relación comercial, ya que en noviembre próximo habrá elecciones presidenciales en Estados Unidos y de momento las expectativas apuntan a que las relaciones de negocios, de inversión, turismo e intercambio comercial, se mantendrán.

Zona dólar  

Durante el foro “20 aniversario del DR-Cafta y las elecciones en Estados Unidos”, que llevó a cabo recientemente la Cámara de Comercio Guatemalteco-Americana (AmCham), se reiteró las relaciones comerciales entre ambos socios comerciales, así como el camino que se ha corrido en estos 20 años, en donde se ha presentado intervenciones extra comerciales, como la crisis económica del 2008 en EE.UU., y en 2020 con los efectos negativos a las distintas variables que se presentaron por la emergencia sanitaria.

A pesar de esas circunstancias, EE. UU. sigue siendo el principal socio comercial de Guatemala en cuanto a las exportaciones y las importaciones, y las cifras muestran un crecimiento lineal.

A manera de contextualización, a la región centroamericana se le considera como “zona dólar”, dado los flujos comerciales que se mueven en ambas vías. En el foro de Amcham también se abordó la perspectiva política, y una de las conclusiones es que no va a haber ningún cambio a las reglas comerciales actuales, pero en algún momento se tendrá hacer la debida revisión.   

Recuento  

Aunque la suscripción del TLC se realizó en 2004 como bloques económicos, para Guatemala el acuerdo cobró vigencia en 2006, luego del proceso de ratificación.

Durante el foro se expuso las cifras de crecimiento que se han obtenido en el comercio con la liberación de las partidas arancelarias, que en general, ya permite un libre acceso de bienes.

Para 2004 las exportaciones de Guatemala hacia Estados Unidos alcanzaban los US$2 mil 660 millones, y para el cierre del 2023 se situaron en US$4 mil 369 millones, lo equivale a un crecimiento del 64.2% en ese periodo.

A mayo último las exportaciones se ubican en US$2 mil 56 millones, con muestra de un mayor dinamismo para este ejercicio, y que está muy vinculada a la demanda, consumo y actividad económica estadounidense.

En cuanto a las importaciones, en 2004 fueron US$3 mil 674 millones y para 2023 se situaron en US$10 mil 190 millones, por lo que hay una tasa de crecimiento del 177% durante este periodo de análisis.

Eso significa que Guatemala le compra más a Estados Unidos de lo que le vende de manera anual.

¿Qué se intercambia?

Con las cifras más recientes a mayo, estos son los cinco productos de Guatemala más relevantes de ventas:

• Artículos de vestuario: US$562 millones
• Banano: US$353 millones
• Frutas frescas y congeladas: US$222 millones
• Café: US$203 millones
• Legumbres y hortalizas: US$87 millones

Los principales cinco productos principales que Guatemala adquiere de Estados Unidos, son:

• Gasolina: US$837 millones
• Diésel: US$730 millones
• Máquinas y aparatos electromecánicos: U$388 millones
• Materiales plásticos y sus manufacturas: US$192 millones
• Maíz: US$168 millones  

¿Cuál es la lectura?

Durante el panel Perspectivas económicas para Guatemala y Estados Unidos, Johny Gramajo Marroquín, gerente Económico del Banco de Guatemala (Banguat), declaró que la economía estadounidense estaría creciendo en 2024 en 2.7% y para 2025 en 1.9%, y también se incluye el crecimiento para Guatemala con un escenario de 3.5% para este ejercicio y 3.7% para el año próximo.

En cuanto a lo que pueda ocurrir en el resultado electoral en EE. UU., para ambos casos, el tema fiscal -en ese país- seguirá siendo un desafío, ya que se estaría incrementándose el déficit fiscal.

Un escenario a la baja del crecimiento económico de EE. UU. tendría efectos en las exportaciones para Guatemala, sobre todo en la parte textil, y el resto de las exportaciones se mantendrían sólida, ya que son materias primas.

Recordó que las exportaciones cayeron el año pasado y para 2024 hay una recuperación que ya están entrando a terreno positivo, y en cuanto a las remesas familiares, están han crecido en dos dígitos desde hace varios años de manera consecutiva, después de la pandemia.

Para Fernando Ocampo, especialista sectorial principal de la División de Comercio e Inversión, de la oficina del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), Guatemala tiene grandes oportunidades en el nearshoring para atraer más inversiones de EE. UU., en sectores estratégicos, en las cuales tiene la fuerza laboral calificada.

Socio estratégico

Fernando Samayoa Delgado, presidente de la Asociación Bancaria de Guatemala (ABG), reiteró que todo lo que se haga en EE. UU., desde el punto de vista comercial, es importante porque es el principal socio comercial en cuanto a las exportaciones, importaciones y de los guatemaltecos que residen en un país en el extranjero.

“Es muy importante que lo que va a pasar en las elecciones y tengo la esperanza que se puedan lograr acuerdos positivos en Estados Unidos. En Guatemala compaginamos mucho en las visiones de sociedad, crecimiento, desarrollo, y en ese sentido hay materias muy favorables para estar como socios comerciales”, apuntó.

Agregó que Estados Unidos es de Guatemala un socio estratégico, y no por el tamaño de país, sino por la cercanía y lo que representa.