“Se ha abierto un caso judicial para aclarar el asunto”, indicó Mehdi Fallah, fiscal de Gilan, provincia donde ocurrió la muerte.
Fallah no ofreció más detalles acerca de las circunstancias del suceso.
La ONG Iran Human Rights (IHRNGO), con sede en Oslo, denunció que Samak murió a manos de las fuerzas de seguridad cuando festejaba la derrota de Irán frente a Estados Unidos el pasado martes, un resultado que supuso su eliminación del torneo.
Tras ese partido se escucharon en Teherán gritos de “muerte al dictador”, en referencia al líder supremo de Irán, Ali Jameneí, en una muestra del descontento de parte de la población con la situación política del país.
Esos gritos son una muestra de apoyo a las protestas que sacuden el país desde la muerte en septiembre de la joven Mahsa Amini, que falleció tras haber sido arrestada supuestamente por haber violado el estricto código de vestimenta que rige en el país.
Las revueltas comenzaron por la muerte de la joven kurda de 22 años, pero han evolucionado y ahora los manifestantes piden el fin de la República Islámica fundada por el ayatolá Ruholá Jomeiní en 1979.
Más de 400 personas han muerto en la represión policial y al menos 2 mil han sido acusadas de diversos delitos por su participación en las mismas, de las que seis han sido condenadas a muerte hasta ahora.
En Prensa Libre ya comenzó la Copa del Mundo: Suscríbase gratis aquí al boletín de Qatar 2022 y viva con nosotros la pasión del futbol.