Desde el primer minuto, fue Corea del Sur el que tomó el protagonismo del encuentro, y esa propuesta ambiciosa encontró como figura al guardameta hondureño Luis López, que sacó su arco en cero con atajadas fantásticas y que si hubiesen terminado en gol habrían hecho justicia a lo que se vio en el campo.
El seleccionado hondureño, dirigido por el colombiano Jorge Luis Pinto, el DT que llevó a Costa Rica a los cuartos de final en el Mundial-2014, fue la gran sorpresa del Grupo D al eliminar a Argentina con un empate 1-1 en el cierre de la primera fase.