¿Qué recuerdan de aquel triunfo?
Fión: Siempre es lindo hacer estos recuerdos, porque nos han dejado una huella muy especial e inolvidable. Para mí fue una experiencia inicial haber estado a la par de grandes jugadores como Guillermo Enrique Gamboa, Hugo Peña (q.e.p.d.), entre otros.
León: Quiero transmitirle este recuerdo a los jóvenes y espero que ell os nos superen algún día, ya que está a su alcance. El éxito comenzó desde el técnico, como lo fue don Rubén Amorín (q.e.p.d.). Él amalgó bien a aquella selección y la consciencia que hizo en nosotros fue muy importante.
¿Cómo era una charla técnica con don Rubén Amorín?
Fión: Don Rubén era una persona que tenía una visión muy grande del futbol. En ese campeonato, él cambió como a cinco jugadores del primero al segundo partido. Eso fue positivo porque el equipo agarró un nivel que ya no lo paró nadie.
¿Fue muy superior el nivel de aquella selección?
León: Pues la realidad es que ya existía el deseo de estar arriba del futbol del área de Concacaf y la rivalidad con México siempre ha estado presente. Se le quiere ganar a cómo de lugar.
Gracias a Dios, Manuel Escopeta Recinos nos dio el triunfo con un gol que enloqueció a la defensa de México.
Fión: Lo que es importante de ese período —1965 a 1975— ha sido el nivel más alto que ha tenido el futbol de Guatemala. La diferencia en relación con México no era mucha. Fue una etapa en la que mantuvimos un nivel muy alto.
¿A qué se debió el éxito?
Fión: Había un grupo de jóvenes y otro de adultos, futbolísticamente hablando, con una fusión muy importante de amistad. Se respetaba el criterio de los mayores.
¿Por qué hubo un estancamiento en el crecimiento del futbol guatemalteco?
León: La verdad está tan clara. Son nuestras autoridades las que han influido en que nuestro futbol se haya estancado bastante. Elemento humano sí hay, pero le falta la oportunidad de practicar el futbol. Nosotros jugábamos en la calle unos partidones de miedo, pero no había tanto carro ni peligro y había canchas a donde ir a practicarlo. Falta visión de nuestro máximos dirigentes.
Desde las autoridades más altas hasta las mas bajitas no se han preocupado por nuestras bases.
El segundo partido lo ganó por 3-1 a Nicaragua. Esto fue el 15 del mismo mes y año.
Posteriormente, el 6 de marzo doblegó 2-1 a Haití.
Contra México fue el juego más complicado, pero al final Guatemala salió airosa con un marcador favorable de 1-0, el 10 de marzo de ese año.
El 12 de marzo igualó 0-0 contra Honduras.
El 14 volvió a festejar con una victoria de 2-0 sobre Trinidad y Tobago.
El 19, en la gran final superó 2-0 a Nicaragua y con ese triunfo obtuvo el campeonato Norceca y hasta hoy el único. Los autores de los goles guatemaltecos fueron Hugo Peña y Manuel Escopeta Recinos.
¿Qué sienten ahora, después de 48 años de haber logrado el campeonato Norceca?
Fión: El ver las portadas de prensa es rejuvenecedor. Verse uno tan joven y tan potente. Fundamentalmente es un recuerdo que lo hace más grande al pasar del tiempo y porque no hemos vuelto a obtener triunfos de esa naturaleza. Recuerdo la bienvenida, fue una fiesta nacional. Hubo carros descapotables y desde la Fuerza Área hasta el Palacio, pasando contra la vía por la Sexta Avenida de la zona 1, fue una algarabía total. Nos hicieron ofrecimientos —casas, carros, estufas, refrigeradoras—, que solo quedaron en eso, en ofrecimientos, pero qué mejor que el amor y el cariño que recibimos de la gente.
León: Cuando regresamos a Guatemala, la sorpresa fue grande. Había tanta gente que apenas se podía caminar. Era una cosa de locura. El Futbol siempre ha enloquecido a las multitudes y a los pueblos. Hasta suicidios han habido. El futbol es la alegría de muchos.
¿Qué papel jugó la familia?
Lijón: La familia siempre juega un papel muy importante en la vida de un deportista. En aquel entonces nos comunicábamos poco cada vez que salíamos porque no había tanta tecnología. Hablábamos solo lo necesario. La comunicación era muy cara.
¿Qué nos pueden comentar de los implementos deportivos?
Fión: Ese ha sido el cambio más drástico que ha habido en el deporte. Ahora, los deportistas están bien implementados. En aquel tiempo cada uno buscaba sus propios zapatos, no había intercambio de camisolas, No había apoyo. Eran condiciones muy diferentes a las de ahora. Nosotros no tuvimos mayores lujos y eso hace que este triunfo nos dé más fortaleza, ya que se alcanzó en condiciones muy diferentes.
¿Cómo eran los viajes de la Selección?
Lijón: Había muchos bromistas como Tin Tan Peña. Emanaban mucha alegría.
¿Qué fue lo más difícil?
Fión: Recuerdo lo que nos pasó en Haití —quinto Norceca—, que decían que nos habían embrujado porque muchos jugadores se enfermaron, pero todo fue superado gracias a la unión que existió. En mi caso falleció mi hijo Guillermo José, de seis meses, y me tocó regresar a Guatemala para estar con la familia y luego volver a Haití para cumplir con la selección.