Con el entusiasmo y emoción de representar dignamente a Guatemala, los jugadores y cuerpo técnico de la Selección de Futsal tomaron juramento con la convicción de dar todo dentro de la cancha para defender los colores Azul y Blanco en la cita mundialista.
Antes de iniciar el acto de juramentación, el sacerdote Norman Bercián dio la bendición a los jugadores.
Para los nacionales la emoción es cada vez mayor y el capitán Willy Ramírez es un privilegio jugar por Guatemala.
“Vamos a seguir dejando el corazón dentro del terreno de juego. Ha sido un honor dejar un ciclo más con estos guerreros”, expresó Ramírez.
Este lunes tendrán el último entrenamiento en el Domo de la zona 13 y partirán mañana rumbo a Cali, Colombia, donde será la sede de su grupo.
El debut de la Azul y Blanco será el domingo 11 de septiembre a las 17 horas contra su similar de Vietnam.