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La gloria vuelve a perseguir a Iván Sopegno

Vientos de tranquilidad envuelven al estratega amuleto y más ganador de Comunicaciones, Iván Franco Sopegno, luego de haber doblegado 2-1 a Suchitepéquez en la final de ida del Clausura 2016, desarrollada el jueves pasado en el estadio Mateo Flores.

Iván Franco Sopegno luce feliz después de haber derrotado a Suchitepéquez, en la final de ida del Clausura 2016 (Foto Prensa Libre: Edwin Fajardo)

Iván Franco Sopegno luce feliz después de haber derrotado a Suchitepéquez, en la final de ida del Clausura 2016 (Foto Prensa Libre: Edwin Fajardo)

“Lo importante fue ganar”, señala, sereno, el rosarino, quien está a 90 minutos de levantar su sexta copa, de ocho finales disputadas al frente del engranaje albo.

“Entramos un poco dormidos, pero logramos emparejar. En algún momento tuvimos  falta de precisión con los pases. Contamos con una  ventaja, y hay que aprovecharla”, afirma, crítico, el sudamericano.

El desasosiego se apodera del técnico albo por las lesiones que aquejan a tres de sus jugadores estandartes, Juan José Paredes, José Manuel Contreras y Emiliano López.

“Tengo que recuperar a la gente que está golpeada. Todos los jugadores son importantes. Para realizar la estrategia necesito saber con quiénes voy a contar”, señala.

“A los que les toque trabajar en Mazatenango deberán entregar todo lo que tienen”, agrega el ganador de las coronas del Apertura 2010, Clausura 2011, Clausura 2013, Apertura 2013 y Clausura 2014.

Contrincante peligroso

Sopegno, quien afirma que no se sorprendió por el modelo de juego aguerrido de los rivales, indicó que los mazatecos tienen una leve ventaja porque no disputaron la llave de acceso a semifinales, instancia donde ellos tuvieron que esforzarse al máximo para eliminar con un global de 4-3 a Marquense.

“Ya sabía que iba a jugar así. Suchitepéquez es un equipo más descansado que el nuestro, bien trabajado, que se siente cómodo cuando trabaja de contragolpe”, manifestó el argentino que comanda la lista de técnicos ganadores cremas.

“Ellos tienen que proponer más. Están en desventaja. El ambiente, en Mazatenango  seguro será bonito. Esperemos que  sea beneficioso para nosotros”, comenta.

El timonel añade que no tiene la fórmula perfecta para sobresalir, pero   gracias al trabajo de sus asistentes y de los futbolistas blancos pueden hacerlo.

“A veces gusta o no gusta, pero se ha logrado sobresalir. Ha sido un trabajo de todos.  Es un equipo que ha ganado muchas cosas”, explica el técnico desde la comodidad del hotel que se ha convertido en su centro de operaciones.

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