El defensa de Xelajú MC llegó ayer al Proyecto Goal para atender su primera convocatoria. El episodio fue para enmarcar. Una sonrisa de oreja a oreja, mientras los medios de comunicación lo acorralaban para conocer las impresiones de un jugador aguerrido que ante las adversidades ha forjado su carácter.
“Lloramos juntos con toda mi familia”, confiesa Hamilton. “En Municipal estuve casi dos años como capitán y en cada partido que jugaba pensaba que me iban a convocar, pero no fue así. Sin embargo, ahora me doy cuenta de que el tiempo de Dios es perfecto”, afirmó.
“Este también es el sueño de mi papá —Javier López—, y gracias a Dios lo está viviendo. El consejo que él me ha dado es que luche por mis objetivos en la vida. El esfuerzo que yo hago no es nada en comparación con el sacrificio que él hacía de levantarse a las 5 de la mañana para ir a trabajar y traer el pan a la casa”, relata el Caudillo.
Quien se unió a las felicitaciones por este llamado fue su amigo y excompañero de equipo Jaime Penedo. “Jaime me habló y nos pusimos a recordar viejos momentos, y esas amistades solo las da el futbol”, cuenta.
El 26 de octubre, Hamilton cumplió 32 años, y aunque nunca perdió la ilusión de jugar con la camiseta azul y blanco, hubo momentos en que aparecieron las dudas. “Me he equivocado mucho, pero esta es una oportunidad que Dios me da para reivindicarme. Sé que han sacado memes en las redes sociales y es parte de la vida; yo lo tomo bien. Sé que esas personas que me critican no les llama la atención como juego, pero daré lo mejor”, expuso.