Los dirigidos por el timonel argentino Mauricio Tapia, con un desgaste físico mayor que el de los albos por la serie previa que disputaron ante Xelajú MC, serán los obligados a proponer las condiciones del juego en el estadio Cementos Progreso, en búsqueda de las anotaciones.
Esta situación los blancos podrían aprovecharla con su nuevo tridente de ataque: José Contreras, Jairo Arreola y Agustín Herrera, que en el duelo de ida lucieron en gran forma y no perdonaron los errores del rival.
Estando así las cosas, los aguacateros no tienen otra alternativa que tratar de reencontrarse con la versión que experimentaron frente a los blancos en la fase de clasificación, donde en ambos duelos triunfaron por 1-0.
Aunque ya tuvieron un primer intento fallido en el juego de ida, buscarán que en este de vuelta florezca ese futbol letal que expusieron ante el pentacampeón nacional.
Mientras tanto Comunicaciones, de la mano de su constante motivación por hacerse de su sexta corona consecutiva, saldrá una vez más con esa convicción de inscribir su nombre en el libro sagrado de la historia del balompié nacional. El duelo de hoy ante los panzaverdes es el antepenúltimo obstáculo que los separa de su ostentosa meta.