La cuenta oficial de la Copa América colgó sinfín de vídeos con la celebración alocada de los argentinos sobre el Maracaná. ¡Campeones! ¡Campeones! se escuchaba una y otra vez decir a los jugadores de la albiceleste guiados por un Leo Messi que no le daba crédito a lo que habían logrado.
Y no era para menos. Era su primer título con su selección. 28 años después de una sequía que le pesaba cada vez más. A los 34 años, la Pulga logró levantar la primera copa importante con la selección mayor. Y así lo disfrutó.
Cuando Rodrigo de Paul quiso salirse de la tangente, de inmediato Messi lo frenó y le hizo una seña que no. El amigo de Leo, Sergio Agüero, aunque sonreía, respaldó la decisión del capitán.
El astro argentino Lionel Messi después de ganar la Copa América dijo: “es inexplicable lo que se siente”.
“Una locura. Es inexplicable lo que siente. Me ha tocado irme triste y sabía que se me iba a dar. Este grupo se lo merecía. Estoy feliz”, señaló Messi horas después del triunfo 1-0 que cortó una racha negativa de Argentina de 28 años sin ganar títulos.
El capitán albiceleste, de 34 años, se quitó además una pesada mochila cargada con tres finales perdidas de Copa América (2007, 2015 y 2016).
“Necesitaba sacarme la espina de ganar algo con la Selección. Fueron muchísimos años. Sabía que en algún momento se iba a dar. Fue en Brasil y ganándole a Brasil. Soy un agradecido”, dijo el estelar a los periodistas mientras abrazaba el trofeo que se le había negado en varias ocasiones.
“Hay que aprovechar este envión. Yo ya les dije a los chicos que son el futuro de la selección. Y ya la demostraron. Ya conocía a los chicos. Es un grupo espectacular. Me siento feliz siendo parte con ellos. Estos 45 días terminaron de forma impresionante”, añadió.
La albiceleste inició un proceso de recambio con jugadores que fueron vitales en la Copa América 2021 como Leandro Paredes, Cristian Romero y Rodrigo De Paul, a este último, quien Messi le dio una lección de respeto sobre el rival en una cancha tan importante como el Maracaná.