El delantero de 27 años había sido eximido del servicio militar obligatorio de cerca de dos años, que habría puesto en peligro su carrera de futbolista, gracias a la medalla de oro conquistada en los Juegos Asiáticos de 2018 en Indonesia.
Son rompió en lágrimas luego de la victoria en la final ante Japón (2-1 en la prórroga), un título que le permitiría cumplir con sus obligaciones mediante sólo tres semanas de entrenamiento de base y cerca de 500 horas de trabajos por la comunidad.
En efecto, Seúl concede exenciones a los campeones de los Juegos Asiáticos así como a los medallistas olímpicos, al igual que a artistas distinguidos en concursos internacionales de renombre.
Lesionado desde mediados de febrero, Son recibió permiso de los Spurs para regresar a su país por “motivos personales” luego del parón de las competiciones debido a la pandemia de coronavirus.
Son, autor de 16 goles esta temporada entre todas las competiciones, en principio no podrá volver jugar en ésta debido a la fractura sufrida en un brazo el pasado 16 de febrero en un partido de la Premier contra el Aston Villa.
El campeonato inglés, suspendido por el momento hasta el 30 de abril, podría ver aplazada su reanudación si así se decide en una reunión que tendrá lugar el viernes entre todos los actores del futbol británico.