En un partido carente de emoción y de escaso peligro, el equipo local abrió manera más agresiva, pero su adversario equilibró rápidamente las acciones.
En la segunda parte, el primer peligro del partido provino del Sassuolo con un preciso tiro libre de Matteo Politano, que tapó con un gran vuelo el portero del Bologna, Antonio Mirante.
Bologna respondió recién a los 84 con un remate de Franco Brienza, que el arquero del Sassuolo, Andrea Consigli, desvió al córner.
Sassuolo ganó a domicilio 2-1 al Napoli en la primera fecha, mientras el Bologna venía de perder 2-1 con Lazio, en el estadio Olímpico de Roma.