Neymar maravilló al mundo con el espectacular tanto que le endosó al Villarreal el domingo, firmando además un doblete, por lo que las expectativas sobre su regreso a la Seleao son máximas.
“Cuando vi el gol pensé, ¿por qué no lo hace conmigo? Tiene que hacerlo en la selección (risas). Esas cosas son las que hacen bonito el futbol, esa forma, esa elegancia de hacer un gol plástico. Pero el gol es gol y si es bonito, mejor todavía”, opinó Dunga en tono distendido antes del último entrenamiento del equipo de cara al superclásico.
Aunque el técnico, que opinó que Neymar está a un mejor nivel ahora que Messi o Cristiano Ronaldo, no quiso cargar todo el peso de la Seleao sobre el 10.
“En el equipo ahora son Neymar+22, no Neymar+10. De otra forma no se puede ganar una clasificación. Si fuera así, los dos primeros partidos [de eliminatorias] ¿cómo hubieran sido?”, preguntó el seleccionador.
Pero la local parece pensar lo contrario y Sao Paulo recibió con la euforia de una estrella del rock a su jugador favorito.
Cada vez que la última gran esperanza del futbol brasileño tocaba el balón, los 200 aficionados que pudieron asistir al entrenamiento rompían en gritos, la mayoría procedentes de admiradoras adolescentes, que siguen con avidez todos los movimientos del gran ídolo del gigante sudamericano.
Las dos potencias del futbol sudamericano y mundial se han enfrentado en 100 ocasiones, con 40 victorias para Brasil, 36 de Argentina y 24 empates.
El responsable de la canarinha, que afirmó que ya tiene el equipo definido para el jueves, no quiso dar pistas sobre la formación y apenas abrió los minutos finales de la sesión para la prensa.
Desconfianza
Con los números de su lado en las cinco veces que dirigió a la selección brasileña contra Argentina -fueron 4 victorias y 1 empate-, Dunga no se fía de la albiceleste, pese a las importantes bajas de su astro y referente Lionel Messi, del goleador Kun Ag ero y de Carlos Tevez, todos lesionados.
“Es un clásico y no hay favorito. El equipo se supera en las dificultades. En teoría, estamos en un buen momento, creciendo, y ellos cayendo de producción, pero es un clásico y todo puede pasar”, opinó el seleccionador.
Tras un decepcionante inicio del premundial, con la derrota en casa ante Ecuador (2-0) y el empate sin goles ante Paraguay, la vigente subcampeona del mundo y de América saltará con urgencias al gramado del Monumental.
Pero la albiceleste contará con otras potentes armas para frenar a un Neymar en plena escalada.
“Argentina juega en casa, tiene otros grandes jugadores en su plantel de los mejores clubes de Europa. Fue vicecampeona mundial, desarrolla un trabajo desde hace 10 años con los mismos jugadores, y eso ya demuestra la dificultad”, alertó Dunga.
Brasil, todo por demostrar
La situación de la canarinha, sin embargo, también dista mucho de ser idílica.
Aún sumergida en la enorme crisis en la que sumió tras la humillación histórica que sufrió en su Mundial, Brasil sufrió otro revés con su decepcionante Copa América de junio, cuando cayó eliminada en cuartos de final por Paraguay.
El comienzo de la eliminatoria sudamericana, además, volvió a encender las alarmas de la pentacampeona del mundo, después de caer por primera vez en su historia en el debut de una fase clasificatoria, con su derrota 2-0 ante Chile.
El equipo de Dunga, cuyo puesto sigue cuestionado, consiguió enderezar el rumbo con su victoria por 3-1 contra Venezuela cinco días después.
