El capitán de la selección alabó la decisión que tomó Dunga en 2010, a pesar de la fuerte presión de la afición y la prensa brasileña, que pedían la convocatoria del delantero, entonces una joven promesa del Santos con 18 años.
La selección brasileña, sin Neymar, fue eliminada en Sudáfrica en los cuartos de final, ante Holanda, y el joven delantero debutó con la Canarinha en el primer partido después del Mundial, en agosto de 2010, de la mano del entonces técnico nacional Mano Menezes.
Neymar aseguró que ahora respeta más a Dunga porque lo conoce personalmente, lo describió como un entrenador inteligente y muy exigente y le auguró que tiene grandes posibilidades de tener éxito en la selección.
El jugador del Barcelona aseguró que tiene una característica en común con Dunga: a ninguno de los dos le gusta perder, según Neymar.