No se identificó al postulante ni la institución, aunque anteriormente se informó que Mayne-Nicholls consultó al centro Aspire de Doha sobre trabajos no remunerados y pasantías. La academia juvenil estuvo vinculada con la exitosa postulación de Catar como sede de la Copa de 2022.
“El señor Mayne-Nicholls no actuó conforme a los intereses de la Fifa e hizo caso omiso de su responsabilidad como funcionario jerárquico de Fifa, alguien de quien se espera actúe con la mayor neutralidad e integridad, para actuar conforme a sus intereses personales”, dijo el comunicado.
La cámara de ética dijo que Mayne-Nicholls violó varios artículos del código de ética de Fifa, incluidos los que prohíben ofrecer o aceptar regalos y exigen evitar los conflictos de interés.
Al recibir por escrito los fundamentos del veredicto, Mayne-Nicholls puede recurrir al comité de apelaciones.
Se consideraba a Mayne-Nicholls un posible candidato a la presidencia de la Fifa cuando su caso salió a la luz en 2014.
Fifa lo designó en 2010 para presidir un equipo de seis miembros que evaluaba los postulantes a los Mundiales de 2018 y 2022. El equipo visitó a los nueve candidatos entre julio y septiembre de 2010.
En el informe técnico, Mayne-Nicholls señaló a Rusia y Catar, los eventuales ganadores, como los anfitriones potenciales de mayor riesgo.
En una votación en diciembre de 2010, el comité ejecutivo de la Fifa prácticamente pasó por alto su informe y un análisis que había encargado de las perspectivas comerciales del proyecto de cada uno de los postulantes.
Poco después, Mayne-Nicholls perdió en su intento de reelección como presidente de la federación chilena.