Gotze, de 25 años, lleva sin jugar al futbol desde el pasado 29 de enero y sin participar en un entrenamiento desde el 27 de febrero, cuando le diagnosticaron su afección.
Considerado a los 20 años como la gran promesa del fútbol alemán, fichó en 2013 por el Bayern Múnich procedente del Borussia, donde nunca consiguió destacar, lastrado por las lesiones y por la falta de confianza de su entrenador de entonces, el español Pep Guardiola.
El centrocampista regresó a Dortmund al comienzo de la temporada pasada, pero tampoco pudo retomar su nivel antes de causar baja.
“Estoy muy feliz de poder volver al terreno de juego y de poder volver a jugar, dentro de poco, en nuestro templo” , agregó Gotze, en referencia al estadio del club, el Signal Iduna Park, que ocupó sus 80 mil localidades en todos los partidos de la pasada campaña.