El Manchester United necesitaba entonces tres goles para poder dar la vuelta a la eliminatoria, algo que nunca pareció capaz de conseguir.
El United, sexto de la Premier League, tendrá ahora que concentrar fuerzas en el campeonato nacional, donde está a cuatro puntos de la cuarta plaza del Manchester City, que marca el límite de la zona de Liga de Campeones. En la Copa de Inglaterra, los Red Devils empataron el pasado fin de semana 1-1 con el West Ham y tendrán que jugar un nuevo duelo para desempatar en los cuartos del torneo.
Para el Liverpool, octavo en la Premier League, este resultado supone un gran éxito moral, ante su rival histórico, y su confirmación como uno de los grandes favoritos de esta edición de la Europa League.