El estadio Monumental y los miles de aficionados, fueron testigos del esfuerzo y entrega de Messi en la cancha, pero por más que lo que intentó su anotación no llegó en el terreno de juego, lo haría en la salida de los camerinos.
Atrás de las vallas que resguardan el paso de los jugadores que hacían su egreso de los vestuarios al autobús, se encontraba franco, un joven discapacitado junto a su familia, a la espera de coleccionar firmas en su camisola y conocer a su ídolo Lionel Messi.
Según informa la página web, minutouno.com, la familia de Franco es originaria de Tierra de Fuego, la provincia más lejana de Argentina y desde las 16 horas esperaban el paso de los jugadores de la albiceleste.
El momento esperado llegó y mientras los seleccionados argentinos salían cabizbajos, Franco y su familia les gritaban y pedían sus autógrafos. “Javi me lo firmas, lo tengo en silla de ruedas” es escuchaba, y Javier Mascherano se dirigió dónde estaban para firmar la camisola de Franco.
Messi apareció y la madre de Franco, gritó: “Lio por favor”, la pulga con una sonrisa llegó junto a ellos, así como lo hizo en Uruguay, abrazó al joven que no pudo ocultar su alegría y emoción al conocer a su ídolo.
El jugador compartió con toda la familia, firmó la camisola con el número 10, y posó para las fotografías, todo eso bajo el lente del Minutouno.com.
“Qué gesto papá”, “Tranquilo Leo vamos a clasificar”, “Leo sos un genio”, y “Sos un capo loco, gracias por todo Lio”, fueron las palabras de la familia al jugador.
? [EL NÚMERO 1] @Argentina no pudo con @SeleVinotinto, pero Leo Messi 1️⃣0️⃣ logró que la historia de Franco tuviera final feliz ?⚽️?? pic.twitter.com/4WLvy3D8R7
— minutouno (@minutounocom) 6 de septiembre de 2017
