Los ‘Nerazzurri’ jugarán su sexta final de la máxima competición continental. La última fue en 2010, cuando conquistó su tercera ‘Orejona’ en la histórica temporada en la que ganó el triplete con José Mourinho en el banquillo.
Es, además, la primera vez que el Inter elimina a su eterno rival en la Liga de Campeones. En los dos precedentes anteriores (en semifinales en 2003 y en cuartos en 2005) fue el Milan el equipo clasificado.
Leao, insuficiente
El euroderbi de Milán, la única ciudad con dos equipos campeones de Europa, comenzó con intensidad por parte de ambos equipos, que buscaron el gol que sentenciase el pase a la final en el caso del Inter o que metiese al Milan en la eliminatoria.
Fue el Milan, que recuperó al portugués Rafael Leao (ausente en la ida por lesión) el que comenzó metiendo miedo al rival, con un disparo alto de Théo Hernandez (5) y, sobre todo, un remate de Brahim Díaz que atajó bajo los palos André Onana (11).
El Inter respondió con una contra de Edin Dzeko que acabó con el remate de Nicolo Barella y la parada de Mike Maignan, aunque la jugada fue anulada por fuera de juego (14).
Y replicó el Inter con dos ocasiones claras: un cabezazo de Dzeko que sacó Maignan con una parada de reflejos (39) y un disparo de Lautaro Martínez que se marchó alto por poco (40).
8 goles en los últimos 9 partidos
El equipo entrenado por Simone Inzaghi sufrió un golpe antes del descanso, cuando el armenio Henrik Mkhitaryan, autor de uno de los dos goles en la ida, tuvo que retirarse lesionado, siendo sustituido por el croata Marcelo Brozovic (44).
Tras el descanso, el Inter logró dormir el partido, que podría haber cambiado de sino si el VAR hubiese entrado a valorar un claro pisotón intencionado de Francesco Acerbi a Sandro Tonali (52).
Un tímido cabezazo de Leao a las manos de Onana fue todo el peligro de un Milan (69) que quedó sentenciado cinco minutos después cuando Lautaro Martínez conectó un zurdazo desde el interior del área para batir a Maignan y sellar el pase a la final (74).
El capitán del Inter, que celebró el tanto con los ‘tifosi’, llega al final de temporada en un gran estado de forma, con ocho goles en los últimos nueve partidos disputados con el Inter en todas las competiciones.