El origen del caso se remonta al 19 de marzo de 2014, cuando el jugador había sido ya condenado a pagar a su agente. En diciembre del mismo año, el Comité de Disciplina de la FIFA le había castigado con una multa.
Inkoom presentó luego un recurso al Tribunal Arbitral del Deporte (TAS), que fue rechazado.
Samuel Inook era lateral derecho en el equipo de Ghana que fue subcampeón de la Copa de África en 2010 y cuartofinalista ese año en el Mundial de Sudáfrica.