Su agenda en Paraguay contempla el lunes una entrevista con el presidente de ese país, Horacio Cartes, quien en el pasado fue el máximo directivo del club Libertad de la primera división del futbol guaraní antes de asumir la jefatura de Estado.
Tras su visita de un día a suelo paraguayo, Infantino se trasladará el martes a Montevideo, adonde además de reuniones previstas con la dirigencia del fútbol charrúa se encontrará con el presidente de Uruguay, Tabaré Vázquez.
La reunión con Vázquez servirá para que Infantino conozca de forma oficial el deseo de Uruguay de organizar conjuntamente con Argentina el Mundial de 2030, que conmemorará los 100 años de la primera Copa del Mundo, que se disputó en suelo charrúa y fue ganada por el seleccionado anfitrión.
Por la noche asistirá al Estadio Centenario para presenciar el partido Uruguay-Perú, por la sexta fecha de la clasificatoria sudamericana al Mundial Rusia-2018, que Ecuador lidera con 13 puntos, seguido por la celeste con 10 unidades.
Se traslada
El miércoles, Infantino es esperado en Bolivia por la nueva cúpula de la Federación de fútbol de ese país, y donde tiene previsto jugar un partido el jueves contra un equipo liderado por el presidente Evo Morales.
“El equipo de Infantino vendrá con Cafú y (Fernando) Hierro, mientras que el de Evo Morales tendrá a varios futbolistas nacionales, de los que estuvieron en el Mundial de Estados Unidos en 1994”, informó el presidente de la Federación Boliviana (FBF), Rolando López.
El partido entre los equipos de Infantino y Morales está previsto para la mañana del jueves en el estadio del club boliviano Aurora, en la región de Cochabamba, centro del país.
El mismo jueves, Infantino cerrará en Bogotá su primera visita como titular de la Fifa, donde se reunirá con la dirigencia de la Federación cafetera y el presidente colombiano Juan Manuel Santos.
La Conmebol, la confederación más pequeña de la Fifa con diez asociaciones, apoyó en bloque la elección de Infantino el 26 de febrero pasado durante el congreso que sustituyó a Joseph Blatter, en medio del escándalo de corrupción que mantiene bajo conmoción al fútbol mundial.
El impacto fue tal en la Conmebol que los tres antecesores del actual presidente, el paraguayo Domínguez, están procesados o presos por el escándalo.
Además, ninguno de los jerarcas que estaban al frente de las federaciones de la Conmebol hasta 2013 permanecen en el cargo, la mayoría implicados en sobornos por derechos de televisión.
El italo-suizo, de 45 años, estuvo presente en el congreso de la Conmebol a finales de enero pasado, cuando obtuvo el respaldo a su candidatura de las 10 federaciones sudamericanas.