Infantino lamentó que la última jornada de la fase de clasificación para la Copa del Mundo de Rusia de la zona de la Concacaf se viera marcada por un error arbitral.
“Cuando te juegas la clasificación para el Mundial y que ese partido se decide con un error importante de interpretación del árbitro, que puede pasar porque los árbitros son seres humanos y cometen errores como todos, yo creo que ha llegado el momento de poder rectificar eso”, afirmó Infantino.
“Cuando el mundo entero lo ve en unos segundos y que el único que no lo ve es el árbitro, pero no porque no lo quiera ver, sino porque le prohíben verlo, y además podría hacer una corrección, yo creo que deberíamos vivir los tiempos que corren, y dar un paso adelante”, insistió el Presidente de la FIFA.
El gol fantasma en cuestión se produjo en una jugada de gran barullo en el área costarricense en la que el balón no llegó a entrar en la portería, pero el árbitro guatemalteco Walter López lo dio por válido.
El tanto permitió a Panamá empatar el partido a 1 en el minuto 52 y le dio alas para finalmente imponerse “in extremis” a Costa Rica, logrando así su primera clasificación para un Mundial.
Infantino quiere aplicar cuanto antes el VAR en las competiciones internacionales pero sigue contando con la oposición de los estamentos más conservadores del futbol.
El Presidente de la FIFA no ocultó su deseo de que se utilice en el Mundial de Rusia el próximo año.
Además, Infantino insistió en que el objetivo del VAR “no es corregir pequeños detalles de juego, sino los grandes errores”.
El presidente de la FIFA finalizó en Lyon la gira por las ciudades francesas que acogerán el Mundial femenino de fútbol que se disputará en 2019.
En la presentación del evento estuvo acompañado por el Presidente de la Federación Francesa de Fútbol, Noël Le Graët, y el Presidente del Lyon, Jean-Michel Aulas.
Lyon será el centro neurálgico del torneo, puesto que acogerá las dos semifinales (2 y 3 de julio) y la final del torneo (7 de julio), un hecho excepcional puesto que en Francia tradicionalmente las finales de los grandes acontecimientos deportivos se suelen disputar en París.