El cuadro de Jose Mourinho no pudo prolongar su racha. Afrontó el duelo con siete victorias seguidas, que le habían estabilizado en la competición. Fue contracorriente durante gran parte del choque. Especialmente desde la media hora, cuando James Milner convirtió un penalti señalado por una mano de Paul Pogba dentro del área.
El gol sosegó al equipo de Jurgen Klopp y agitó al United, que se topó con las buenas actuaciones del portero belga Simon Mignolet.
Mourinho recurrió en la segunda parte a Wayne Rooney y a Juan Mata, que imprimieron velocidad al ataque local. Sin embargo, el Liverpool pudo sentenciar el choque al contraataque. Le faltó puntería.
Así, en el tramo final, el Manchester United encontró el empate. Fue en una acción de acoso a la portería del Liverpool. Primero Muraine Fellaini cabeceó al palo. El rechace lo recogió el ecuatoriano Antonio Valencia, que asistió a Ibrahimovic que batió a Mignolet.
El sueco logró el gol 600 de la Premier. El decimocuarto en la presente campaña de la Premier, donde presume como máximo goleador junto al español Diego Costa y el chileno Alexis Sánchez.