Las pesquisas se centran en negocios relacionados con el fútbol desde el año 2015, que habrían evadido impuestos al fisco portugués a través de diferentes prácticas delictivas.
Los pagos de comisiones y los derechos de imagen centran las principales sospechas de la investigación, cuyos montantes podrían haber sido camuflados mediante el blanqueamiento y el fraude fiscal.
Esta mañana la Fiscalía lusa ha venido a mi domicilio en Oporto, como ha ido a otros 76 domicilios de sociedades deportivas, jugadores y clubes, para pedirme documentación. Me he puesto a su entera disposición. La TRANSPARENCIA es uno de mis principios.
— Iker Casillas (@IkerCasillas) March 4, 2020
En esta ocasión se practicaron registros en 76 dependencias, algunas de ellas en clubes como Oporto, Sporting o Benfica, que ya han hecho pública su intención de colaborar con la Justicia lusa.
También fue registrada la casa de Iker Casillas, que aún milita en el Oporto, e, incluso, también hubo búsquedas en las casas de los presidentes de los principales clubes de fútbol de Portugal.
El propio guardameta español comunicó que está “absolutamente tranquilo” en relación a las investigaciones y que tiene “plena confianza” en la Justicia portuguesa, por lo que se ha puesto a disposición de las autoridades lusas.
Entre los domicilios registrados, según algunos medios portugueses, la vivienda del exjugador del Atlético de Madrid, el colombiano Jackson Martínez, que milita en el Portimonense, según publicó el diario deportivo “O Jogo”.
Para desarrollar toda la operación “Fuera de Juego” fueron movilizados en la jornada 101 inspectores tributarios y 181 agentes de la Guardia Nacional Republicana (GNR), en una investigación que aún no ha concluido y para la que se ha decretado secreto de sumario.
Además de registrar las dependencias de los tres principales clubes, también han sido registradas las sedes del Vitória de Guimarães, Braga, Marítimo o Portimonense.
En el punto de mira de las investigaciones estaría, según la prensa lusa, el agente deportivo Jorge Mendes y su empresa Gestifute, que habrían sido registradas también este miércoles.
Además, también fueron registradas las oficinas del abogado portugués Carlos Osório de Castro, que trabaja para la empresa de Mendes.
Incluso, la versión digital del semanario “Expresso” divulgó que uno de los 47 imputados, tras los registros, es el propio empresario Jorge Mendes.
Algunos medios lusos divulgaron que las investigaciones podrían tener como base los datos del hacker portugués Rui Pinto, artífice de los documentos de “Football leaks”, que ha desvelado diferentes entramados fraudulentos en el fútbol europeo, y que se encuentra en prisión preventiva en Portugal.