En ambos casos, eran las candidaturas únicas para sus respectivos años, por lo que la concesión era desde hace meses un secreto a voces.
La Federación Noruega de Futbol (NFF), muy crítica con la concesión del Mundial-2022 a Qatar, explicó en un comunicado su negativa a dar su visto bueno a un proceso “defectuoso e incompatible” con los principios “de responsabilidad, transparencia y objetividad” que reivindica la FIFA.
En 2030, el ‘Mundial del Centenario’ unirá a seis países, un formato único en la historia del torneo, nacido en 1930 en Montevideo.
Uruguay, Argentina y Paraguay tendrán tres partidos del evento, como recuerdo a esos 100 años de vida de la competición.
Esos partidos en Sudamérica serán los días 8 y 9 de junio de 2030. Los seis equipos concernidos y sus hinchas tendrán luego que cruzar el Atlántico: en España, Portugal y Marruecos se jugarán los otros 101 partidos, del 13 de junio al 21 de julio.
Con 11 de los 20 estadios propuestos, España debería ser la sede principal y acogerá el Mundial por segunda vez en su historia, después de 1982.
Marruecos, en el pasado cinco veces aspirante sin éxito a acoger este torneo, se convertirá por su parte en el segundo país africano en ser sede mundialista, después de Sudáfrica en 2010.
Diplomacia deportiva saudita
España y Marruecos se disputan ser el escenario del partido de apertura y de la final, proponiendo respectivamente el Santiago Bernabéu de Madrid o el Camp Nou de Barcelona por un lado, y por el otro el futuro estadio Hassan II, entre Casablanca y Rabat.
Ese recinto marroquí aspira a ser “el mayor estadio del mundo”, con capacidad para 115.000 espectadores.
Portugal aporta al proyecto los dos estadios principales de Lisboa -los de Benfica y Sporting-, así como Oporto. Los lusos aspiran principalmente a acoger una de las semifinales.
“Un sueño hecho realidad. Portugal va a recibir el Mundial 2030 y nos llena de orgullo. ¡Unidos!“, escribió la estrella del fútbol portugués, Cristiano Ronaldo, en las redes sociales.
Invocando el principio de rotación geográfica, la FIFA limitó en su día la sede de 2034 a las confederaciones de Asia y Oceanía.
Arabia Saudita, el país que en los últimos años se ha hecho un hueco en el mapa del deporte a golpe de talonario, se encontró ya hace meses siendo la única candidata después de las renuncias de Australia e Indonesia, y del enfriamiento de las ambiciones futbolísticas de China.
¡Presentamos a los anfitriones de las próximas dos ediciones de la @fifaworldcup_es! 🏆
— FIFA (Español) (@fifacom_es) December 11, 2024
Marruecos, Portugal y España serán los anfitriones en 2030, con partidos de celebración del centenario en Argentina, Paraguay y Uruguay.
Cuatro años después, Arabia Saudí será sede de la… pic.twitter.com/yAn6zzXvP3
El reino ultraconservador, que ha apostado por una estrategia de diversificación económica y de mejora de su imagen, solo dispone por ahora de dos de los catorce estadios de más de 40.000 plazas que se requieren.
Más allá del reto logístico, las altas temperaturas del verano saudita podrían obligar a desplazar las fechas habituales del torneo, como ya ocurrió en 2022 con Qatar. También habrá que gestionar en el caso de 2034 el ramadán, previsto entonces en diciembre.
🥰 𝗚𝗥𝗔𝗖𝗜𝗔𝗦 por acompañarnos en una fecha que ya es historia del deporte español.
— RFEF (@rfef) December 11, 2024
Hemos trabajado, trabajamos y trabajaremos junto a @FRMFOFFICIEL y @selecaoportugal por hacer EL 𝗠𝗘𝗝𝗢𝗥 𝗠𝗨𝗡𝗗𝗜𝗔𝗟 jamás visto.#YallaVamos2030 es una maravillosa realidad. pic.twitter.com/tr9seYUQuE