Un penal transformado por Sergio Ramos en el minuto 79 fue suficiente para la victoria blanca en el pequeño estadio Alfredo Di Stéfano, donde el Real Madrid juega sin público sus partidos tras la reanudación de La Liga española después del parón por el nuevo coronavirus.
Con cinco jornadas por delante, el Real Madrid tendría por lo menos que sufrir dos tropiezos para dar opciones al Barcelona de remontar en la recta final.