El cuadro de Pochettino, que llegó al St. Mary después de dos victorias seguidas, tuvo que enderezar un partido que se le torció a los dos minutos, cuando una falta lanzada por James Ward-Prowse fue rematada de cabeza por el central holandés Virgil Van Dijk.
Fue una cuestión de tiempo para el combinado londinense, que desperdició un par de ocasiones antes de lograr el empate en el minuto 20. Un pase desde la izquierda de Danny Rose fue finalizada por Dele Alli, que dejó en evidencia a la zaga local.
El Southampton del francés Claude Puel, que llevaba tres partidos sin perder -ganó al Bournemouth y al Middlesbrough y empató frente al Stoke- se mantuvo vivo en el partido hasta el descanso. Pero decayó en cuanto Harry Kane, en el minuto 52, remató de cabeza un córner botado por el danés Christian Eriksen para adelantar al Tottenham.
Poco después el equipo de Londres pudo ampliar su ventaja con un penalti por derribo a Dele Alli cuando encaraba al meta local que marró Kane. Sin embargo, le costó caro al Southampton que se quedó con diez jugadores por la expulsión de Nathan Redmond.
El Tottenham redondeó su décima victoria del curso en los últimos minutos. El surcoreano Heung-Min Son sentenció el partido a cinco del final al culminar un contraataque. Y, a continuación, Delle Alli aumentó su cuenta y la de su equipo al batir a Fraser Forster tras un pase de Danny Rose.