Es el primer partido desde 2013 y “una oportunidad para nosotros, aficionados y deportistas, de demostrar al mundo que merecemos que se disputen este tipo de partidos en nuestro territorio”, estimó el domingo el entrenador del Al Zawraa, Essam Hamad, en una conferencia de prensa.
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El entrenador del equipo del Ejército del Aire, Basim Qasim, solicitó por su parte “el levantamiento completo de las restricciones que pesan sobre el fútbol iraquí”.
En un país desgarrado desde 2003 por las tensiones religiosas y políticas, el fútbol es una de las pocas pasiones compartidas, pero la inseguridad llevó a la FIFA a prohibir la disputa de partidos internacionales en el país.
La última prohibición fue dictada en 2013, tras una serie de actos violentos, entre ellos el asesinato de un entrenador y la multiplicación de sangrientos ataques yihadistas, en ocasiones directamente contra los campos de fútbol, lugares de reunión habitual de jóvenes y niños. También hubo atentados contra bares y cafés que retransmitían partidos de fútbol.
Bagdad, todavía no
Las tropas iraquíes han recuperado progresivamente desde hace dos años territorios conquistados por la organización Estado Islámico (EI).
La FIFA levantó el veto a los partidos en Irak a principios de mayo, bajo una serie de condiciones.
Por ello, la AFC autorizó la disputa de este partidos del lunes entre dos clubes importantes de Irak. El equipo del Ejército del Aire es el defensor del título de la Copa de la AFC y el Al Zawraa, con sus 12 títulos de campeón y sus 14 Copas de Irak, es el más laureado del país.
El partido no se jugará, sin embargo, en la ciudad de origen de los clubes (Bagdad), que todavía es víctima de atentados, sino en el norte del país, en Erbil, la capital de la región autónoma del Kurdistán, alejada de la violencia. Bagdad y Erbil están separadas por 400 kilómetros.
El reto es de gran envergadura para las autoridades iraquíes, que esperan “probar la capacidad para organizar y acoger partidos internacional con eficacia y seguridad”, según el presidente de la AFC, Salman bin Ebhrahim Al Khalifa.