El francés Steven NZonzi fue expulsado en el Sevilla en el minuto 86, al ver la segunda amarilla, y su equipo tuvo que terminar los últimos minutos con uno menos.
Los hombres de Unai Emery, verdugos del Molde noruego en la anterior ronda, tendrán que trabajar duro en la vuelta ante el líder de la liga suiza si quieren volver al estadio St Jakob Park de Basilea, donde se disputó el partido este jueves y donde tendrá lugar la gran final de esta edición, el 18 de mayo.
El Sevilla levantó el trofeo de campeón tras las finales de 2014 en Turín y de 2015 en Varsovia. Además fue campeón de la Copa de la UEFA, antecedente directo de la actual Europa League, en 2006 y 2007. Ello le sitúa en cabeza del palmarés de este torneo.
Final del partido en el St. Jakob Park #vamosmisevilla #UEL pic.twitter.com/WEAVHTrFKG
— Sevilla Fútbol Club (@SevillaFC) March 10, 2016
El Basilea, que en los dieciseisavos de final se deshizo del Saint-Etienne francés gracias a un gol en el descuento, esperan poder brillar en la segunda competición europea igual que en 2013, cuando llegaron hasta las semifinales, antes de ser eliminados en puertas de la final por el que luego sería el campeón, el Chelsea inglés.
Dura batalla
Desde el principio, el Sevilla pareció más inspirado y con más hambre de victoria, pero en el minuto 7 el Basilea pudo haberse adelantado por medio del atacante austríaco Marc janko, que solo en el punto de penal cruzó demasiado su remate de cabeza.
Dos minutos más tarde, el francés Steven NZonzi respondió, también con un remate de cabeza.
El Basilea se defendió muy bien y el arquero checo Tomas Vaclik fue determinante para que los locales pudieran terminar con su arco a cero.
Antes del descanso (45+1) , NZonzi rozó el gol de nuevo con un remate de cabeza, que cruzó demasiado a centro del danés Michael Krohn Dehli.
En la segunda mitad, Vaclik brilló especialmente.
Evitó el gol español en el 68, a remate del francés Kevin Gameiro. En el 80, el portero checo detuvo en dos tiempos, esa vez ante un intento del ucraniano Yevhen Konoplyanka.
Las ocasiones del Basilea fueron puntuales. El argentino Matías Delgado tuvo una destacada en el 73, pero su disparo lejano se perdió por la línea de fondo.
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