Sin Messi, cómodamente instalado en la grada junto con su hijo Thiago, la versión B del Barcelona ofreció apuntes interesantes como se vio desde el inicio.
Lionel Messi mostrándole el reino a su heredero. pic.twitter.com/hG63xb6r9B
— Invictos (@InvictosSomos) October 24, 2018
Rafinha fue el protagonista de las acciones de mayor peligro. Remató flojo en el 20, no acertó después de una gran combinación con Alba y Luis Suárez en el 28, pero no falló a la tercera.
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Inició una conducción en el 32, cedió el balón sobre Suárez convertido en interior derecho y el centro perfecto del uruguayo lo remató sin dejarla botar Rafinha para el 1-0.
Messi en el Camp Nou viendo a sus compañeros… pic.twitter.com/8GsMEdikZ1
— InMESS🔟nante (@imMESS10nante) October 24, 2018
Ya sin Rafinha, sustituido por Semedo en el 72, ni Arthur -entró por él Arturo Vidal-, el Barsa rehizo su centro del campo buscando más presión y ya no sufrió más, al contrario le penalizó su falta de acierto ante Handanovic hasta que Jordi Alba, en el minuto 83, remató cruzado para decidir el partido (2-0).
Hasta fuera del campo y lesionado es el mejor jugador de la historia. pic.twitter.com/5hJ9Bd1HFN
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